La cocina mexicana es fruto del intercambio entre culturas. Por ello, la nombraron Patrimonio Inmaterial de la Humanidad en 2010, por su riqueza, es decir, variedad, tanto en sus ingredientes, como en sus técnicas y platillos.
Esto, gracias a diversos factores como la fertilidad del territorio, así como la llegada de extranjeros. Sin embargo, esto último fue la clave para la consolidación de la cocina mexicana.
Por eso, hoy te traemos 5 culturas que ayudaron a consolidar la cocina mexicana.
Por Sandra Carolina Jiménez Pedroza.
Cultura indígena
Previo al arribo de los españoles, en lo que hoy conocemos como México, los pobladores tenían una saludable y variada alimentación. Ésta consistía en el consumo de hortalizas, aves, frijoles, chiles, cacao y maíz, entre muchos otros alimentos.
Todos ellos de tal exquisitez que dejaron maravillados a los conquistadores, especialmente a Hernán Cortés, quien en una carta a Carlos V le habló de las delicias del Nuevo Mundo.
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Cultura española
Con la consumación de la Conquista, se dio un intercambio más fluido entre la cultura indígena y la española.
En otras palabras, el transporte de productos, principalmente alimentos, entre ambos mundos resultó beneficioso para todos.
Algunos de estos fueron: lechuga, zanahoria, pepinos, garbanzos, lentejas, nueces, almendras, caña de azúcar, plátanos, vacas, cerdos, cabras, ovejas, etc.
Asimismo, los españoles compartieron algunas técnicas de conservación, las cuales sirvieron para la creación de embutidos.
Otro proceso que trajeron fue la cristalización de frutas.
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Cultura africana
Los españoles esclavizaron a hombres y mujeres de África con el propósito de cultivar la caña, entre otras cosas, en el Nuevo Mundo.
Así pues, la presencia de estas personas, principalmente mujeres, contribuyó a expandir y enriquecer la gastronomía de lo que hoy conocemos como México. Por ejemplo, ahora tenemos flor de jamaica, moronga, café, etc.
De igual modo, el papel de las mujeres fue relevante en la Nueva España. Pues, según la doctora María Elisa Velázquez, estas mujeres, junto a las españolas e indígenas se reunían en la cocina para intercambiar saberes por medio de platillos.
Además, algo que destaca la doctora Velázquez es la diferencia entre las cocinas afrodescendientes de Veracruz con las de Oaxaca y Coahuila.
Esto, porque en cada lugar había distintas culturas con las que las mujeres afro tuvieron contacto.
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Cultura oriental
Una vez establecida la Nueva España inició el comercio con Oriente.
Éste consistía en el envío de varios barcos con productos como porcelanas, sedas y, sobre todo, especias.
Algunas de las más relevantes son: pimienta, mostaza, cúrcuma, canela, etc. Todas las cuales sirvieron para sazonar infinidad de platillos.
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Cultura francesa
Si bien la cocina francesa ya había entrado al país de la mano de los Habsburgo, fue Porfirio Díaz quien casi logró imponerla en México.
En otras palabras, el ex presidente intentó hacer de la gastronomía francesa la bandera de nuestra entonces incipiente nación.
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No obstante, las técnicas traídas por los franceses como el baño María o platillos como las crepas, aún perviven en el país. Incluso fueron modificados, lo cual sólo demuestra el ingenio e imaginación del pueblo mexicano.
En conclusión, la cocina mexicana es un intercambio de culturas que refleja innumerables aspectos de nuestra vida e historia, positivos y negativos, pero interesantes.