Uno de los grandes exponentes de la cocina de la ciudad de Puebla son las icónicas cemitas. Aunque parezca sorprendente, si bien es un platillo tradicional de esta parte de México, el origen de uno de los ingredientes más importantes tiene lugar en Europa.
Esta vez te contamos sobre este elemento importante de la gastronomía poblana, que surgió con la aportación de otras naciones. Y que sin duda, no sería lo mismo sin el toque mexicano.
Por: Desiree Perea
Los elementos que conformas las cemitas tradicionales
Son tres ingredientes los que no pueden faltar para poder vender una cemita como tal: pápalo, quesillo y chipotle. El origen del pan de la cemita tiene su origen en España claramente. Durante la época de la conquista, nuestro país aprendió a dominar esta técnica dentro de las panaderías locales.
En este proceso también aportó el conocimiento de los franceses. La estructura principal del pan era un gran aliado para llevar el los largos viajes, ya que era firme y resistía por un par de días.
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Si bien la magia de las cemitas se puede apreciar desde el exterior, dentro de los panes se concentra todo un paraíso de sabores. La versión tradicional tradicional está sí o sí rellena de una milanesa de res. El pan se humecta con una capa de mayonesa y frijoles refritos. Para añadir color y frescura, las verduras no pueden faltar: cebolla, jitomate, aguacate y no necesitarás más.
Como todas las recetas antiguas, con el paso del tiempo se encuentran nuevas combinaciones que terminan popularizándose gracias al gusto de los comensales. Actualmente es posible encontrar cemitas rellenas de carne enchilada, queso panela, jamón. Incluso existen aquella que lo llevan al siguiente nivel, con carnitas, mole con pollo, carne árabe y mucho más.
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Un platillo donde se fusionan diversas culturas
Si bien es un platillo típico e imperdible si visitas el estado de Puebla, realmente está compuesta por elementos de diferentes regiones del mundo. Actualmente podemos considerarla como un pariente de las tortas o los pambazos, pero sin duda los elementos que la construyen la convierten en un platillo único. Sin embargo, las cemitas realmente son un punto de encuentro donde se aprecian las cualidades de ingredientes mexicanos y europeos.
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De esta manera, las cemitas poblanas sin duda son un platillo sustancioso que pueden ayudarte a llenar el estómago después de un día de paseo por la ciudad. Un platillo destacable por todo lo que puede contener en su interior, jugando con texturas, sabores y hasta colores. Desde el momento en que se muestran en los mercados o restaurantes locales, es imposible negarse a probarlas.