Nada se compara con una buena pieza de pan dulce mexicano, ya sea para comenzar o finalizar el día. Es imposible negarse a estas delicias horneadas que parecen no tener fin. Hay un pan dulce para cada gusto, y los puerquitos de piloncillo se han ganado un lugar seguro en la mesa de miles de hogares a nivel nacional. En esta nota, te contamos sobre su origen y cómo es que este peculiar pan dulce ha deleitado paladares durante varias generaciones.
Por: Desiree Perea
Puerquitos de piloncillo ¿pan o galleta?
Encontrar la respuesta a esta pregunta solo puede responderse una vez que pruebas los puerquitos de piloncillo. Además, también depende del lugar donde los encuentres y la receta que se conozca; la receta original ha sufrido ligeros cambios a lo largo de los años. Algunas versiones mantiene una textura más esponjosa, mientras que otros prefieren acercarlo más hacía una galleta. Pero no está a discusión que todos son deliciosos.
Te podría interesar: Panettone, conoce todo sobre este pan dulce italiano
Su origen se encuentra en la región de la Huasteca, y específicamente se presume como una receta del estado de Tamaulipas. Diversos relatos cuentan que tuvieron su origen durante la época colonial. Una vez que se dió a conocer, se convirtió en un pan dulce favorito por su aroma, sabor, textura y presentación.
Otra versión sobre su origen menciona que es una re-interpretación del pan de jengibre que se conoce a nivel mundial. Sin embargo, la versión mexicana decidió aprovechar ingredientes locales en lugar del jengibre. Así es como llegaron a la receta final que hoy caracterizan a los puerquitos de piloncillo.
Te podría interesar: Fruta de horno, el suave pan dulce que no lleva levadura
El proceso de elaboración es todo un arte que busca mantenerse vigente. Por ejemplo, algunos lugares aún hornean los puerquitos de piloncillo en hornos de leña; esto logra un aroma y textura incomparable. Asimismo, este pan dulce es realmente aromático pues además del piloncillo también puede incluir canela, clavo o anís.
Los puerquitos de piloncillo son una de las muchas delicias que nos ofrece la panadería mexicana. Su aroma es todo un sueño y muchas veces resulta difícil decirles que no. Aún más si se acompañan con una taza de café de olla, atole o chocolate caliente, es un combo ganador. La tradición que encapsulan los han llevado a ser reconocidos a nivel mundial. Así que, la próxima vez que te encuentres un puerquito de piloncillo, sabrás la importancia y legado que representan para México.