Al oriente del Estado de México se encuentra enclavado el municipio de Chimalhuacán que, aunque poco se sabe, destaca por los sabores que guarda su tradicional gastronomía. Uno de sus platillos más representativos es el “pollo a la basura”, como comúnmente se le conoce en los barrios originarios, en la parte alta del municipio, donde se ha consumido desde hace muchos años. ¿Lo sabías?
Pero, ¿de qué se trata? Es un plato muy económico, sencillo de preparar y no por eso deja de ser sumamente delicioso; tiene su base en ingredientes como el cilantro, los nopales, cebollas cambray, piezas de pollo, sal al gusto y, lo que no puede faltar por ningún motivo, los xoconostles.
Y, ¿por qué se llama “a la basura”? Porque en su preparación no se desperdicia casi nada; por ejemplo, se utilizan los rabitos de las cebollas, así como los tallos de las ramas de cilantro. Todo esto le da un sabor muy especial.
Ya sea para ofrecer en alguna celebración, como en los carnavales, para consumirlo como una comida del día o para degustar en las reuniones de los fines de semana con toda la familia, el “pollo a la basura” es un platillo que no falta en los hogares de las familias chimalhuacanas a lo largo del año.
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Saludable y nutritivo
Su ingredientes son sumamente nutritivos, ya que los nopales contienen vitaminas, minerales, fibra y aminoácidos, por lo que ayudan a eliminar el colesterol elevado y controlar el exceso de ácidos gástricos, proteger la mucosa gastrointestinal y prevenir las úlceras.
Mientras que el xoconostle, que tiene un gran parecido a la tuna pero de sabor agrio, aporta al organismo importantes cantidades de fibra, minerales, vitamina C y antioxidantes, propiedades nutricionales muy buenas para llevar una dieta rica y saludable.
Además, el cilantro, hierba fresca procedente del Mediterráneo y con gran uso en las cocinas de la India y América Latina, posee un alto contenido de vitaminas y antioxidantes, además de que tiene propiedades estimulantes, antiespasmódicas, antiinflamatorias y antibactericidas. En tanto que las cebollas cambray tienen propiedades desinfectantes y benéficas para el sistema nervioso, y el pollo es un alimento rico en proteínas y vitaminas.
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¿Cómo se prepara el pollo a la basura?
Es de lo más sencillo y rápido de cocinar, así que pon atención. Los nopales, las cebollas y los xoconostles se cortan en cubos, mientras que las cebollas cambray se introducen enteras, pero aquí, a diferencia de otras preparaciones, hay que picar e incluir también la mayor parte del rabo de las cebollas y del tallo del cilantro, porque esto es parte esencial del platillo.
Por otra parte, en una olla o cazuela se pone a freír el pollo previamente lavado. Una vez que esté medio cocido, se le agregan los chiles de árbol para sazonarlos y que suelten su sabor. Después, se agregan las verduras picadas y se deja cocinar todo a fuego lento por 40 minutos. Una vez cocinado, se sirve y está listo para degustar; hay algunos comensales que acompañan este platillo con un pulque natural, la bebida de los dioses.
Hace algunos años, en los cerros del municipio se podían encontrar nopaleras por todas partes, por lo que preparar el “pollo a la basura” no representaba gran problema, pues los nopales y los xoconostles estaban garantizados. Ahora, aunque ya no se pueden cortar como antes, se encuentran en cualquier recaudería o supermercado.
Todos los ingredientes están a precios accesibles, así que no hay pretextos para preparar en casa este alimento tradicional del Estado de México y que muy pocos conocen. Además, es muy recomendable para personas con diabetes, debido a todas las propiedades que tienen sus ingredientes.
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