Las nieves de garrafa son una verdadera delicia que ayuda por mucho a aliviar la sensación de calor. Su anatomía y métodos de preparación las hacen diferenciarse fácilmente de los sorbetes y el helado. Conoce las razones por las que este postre en México es todo un arte.
Desde su infinidad de sabores, hasta el proceso largo que siguen para poder obtener una textura tersa y delicada, con equiparables a una obra de arte. Sin duda, son una tradición que vale la pena conservar y aprender para apreciar su valor.
Por: Desiree Perea
Una técnica con mucho brazo
México tiene mucho que presumir en temas de gastronomía y en los postres no se queda atrás. A partir del mes de marzo, el calor ha estado en su máxima potencia, incluso un poco antes de que entrara la primavera.
Dentro de las indicaciones para atravesar los días con altas temperaturas está el mantenerse hidratado y existe una receta que puede ayudar. Este es un postre que puedes disfrutar durante la semana con un sabor diferente.
Las nieves de garrafa con un tesoro que llegó a nuestro país desde el continente europeo hace varios años. De hecho, aquí los primeros lugares que comenzaron a venderlas lograron perfeccionar la técnica y herramientas para hacer el proceso de preparación más eficiente. Comenzando por los recipientes para la preparación, consiste en una cubeta de metal honda y una cubeta de madera de mayor tamaño.
La razón por la que el recipiente de madera es más amplio tiene que ver con dos elementos que ayudan a congelar la mezcla que va a formar la consistencia de nieve. El hielo se ayuda de la sal de grano para no derretirse tan rápido y que pueda intensificar la propiedad de enfriamiento. Después de tener los elementos, se necesita únicamente de la potencia humana.
El movimiento de brazo en círculos para hacer girar el recipiente de metal logra que se comience a formar la nieve de garrafa. De hecho, este proceso puede requerir hasta 2 horas de movimiento continuo, dependiendo de los litros de preparación inicial. Una vez que se comienza a congelar, también ayudará a mantener frío el recipiente y dejar que el proceso siga su curso.
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La magia de las nieves de garrafa
Si bien las recetas de estas nieves son dignas de admirarse en cuanto al esfuerzo para la formación, la receta para crear la mezcla frutal también es importante. Para aquellas a base de agua se utilizan las frutas, un poco de agua y endulzantes. Si se buscan aquellas con una consistencia cremosa, se cambia el agua por leche evaporada.
Asimismo, las nieves de garrafa suelen tener sabores de temporada, pues esto ayuda a aprovechar el azúcar natural de las frutas maduras. Las frutas que podemos encontrar en estos meses se mantienen como los sabores estrella de los vendedores, ya que el sabor es mucho más intenso. Además, la clave también está en utilizar frutas naturales, sin ayuda de jarabes que puedan modificar el sabor.
Así es como las nieves de garrafa han marcado una gran tradición en nuestro país. Incluso existen estados y municipios dónde se coronan como expertos de esta preparación. Al sur de la CDMX, cada año puedes probar desde sabores clásicos hasta otros más exóticos en Feria de la Nieve de Xochimilco.
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De igual manera, si vas a la ciudad de Oaxaca en junio puedes disfrutar de la Guelaguetza con varias nieves de garrafa en mano. Los sabores que puedes encontrar disponibles en dicha zona del país también es impresionante: guanábana, nanche, mango, pitahaya y hasta aguacate. ¿Te imaginas qué rico?