Dentro del mundo de la gastronomía existe una infinidad de ingredientes que nos brindan sabores, texturas y aromas increíbles. Jugar con ellos nos hace crear platillos deliciosos llenos de gran sabor. Precisamente eso es lo que hacen los brotes: nos brindan sabores reales, pero además están llenos de nutrientes. ¿Los conoces?
Por: Adi Zeitelberger
¿Qué son los brotes?
Los brotes o sprouts, son los germinados que resultan de las semillas de ciertas verduras o plantas. Existen muchas variedades entre las que podemos encontrar: de cilantro, de amaranto, de verdolaga, de zanahoria, de mostaza, de rábano, de trigo, brócoli o el famoso de alfalfa.
Los brotes otorgan a nuestros platillos sabores honestos, intensos y profundos, además de que son nutritivos. Estos nutrientes dependen mucho del tipo de semilla germinada, pero en general los brotes son ricos en folatos, magnesio, fósforo y vitamina K.
Otra propiedad por la cual los brotes son valiosos es que la cantidad de nutrientes tienen es mucho mayor a la de las verduras en su versión madura.
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Brote al plato
La mejor manera de integrar estos germinados en tus preparaciones es de manera cruda, ya que solo así se conservan todos los beneficios de los que te contamos. Puedes integrarlos en ensaladas o para darle frescura a tus pastas, cortes de carne o acompañar una tabla de quesos con ellos.
Aunque los brotes son caros y pueden marchitarse si no los consumes rápido, hay maneras de conservarlas por ejemplo mantenerlos con papel húmedo y con buena ventilación.
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Germina los tuyos
Una buena opción es hacer los tuyos en casa. Mira cómo hacerlo:
Para empezar es necesario germinar las semillas, remojando con agua por algunas horas, luego es necesario enjuagar y trasladar a una bandeja de germinación. Para ello es importante que las semillas presenten raíces de medio centímetro de largo para introducirlos a la bandeja con tierra húmeda. Es necesario regar la bandeja 2 veces al día con luz tenue y a temperatura ambiente.
Espera 10 días y observa cómo van creciendo tus brotes para cosechar. Ahora sabes las propiedades que los brotes pueden ofrecer a nuestra salud, así como poder terminarlos en casa. ¿Y si te animas a producir los tuyos?