Para ver mejor la CDMX, hay que hacerlo desde arriba. Además de con platos reconfortantes, coctelería de la casa o un vino mexicano en mano. A este lugar no vendrás más que a pasar un gran rato, con mesas bien servidas y un ambiente que recuerda mucho a la playa. ¿Qué esperas para reservar en Terraza Palmares, del chef Jorge Guerra?
Terraza Palmares, un lugar para estar ‘fuera’ de la CDMX
Un respiro de la Ciudad de México siempre se agradece. Con todo y que la amemos con locura. Si ese respiro viene acompañado de una propuesta gastronómica de nivel, mucho más.
En Terraza Palmares, lo primero que verás cuando subas, es a un montón de gente pasando un buen rato, en un lugar con mucha vegetación y música que incita a sonreír.
Luego llegarás a la mesa y podrás empezar a escoger qué probar de sus entradas, de sus fuertes, postres, drinks y vinos.
Algo que nos gusta del sitio es que no tienes que quebrarte mucho la cabeza para tomar una buena decisión con sus distintas cartas. Aunque están divididas por apartados, la verdad es que tienen pocas opciones de platos y bebidas, así como elegibles muy bien diferenciados y para todos los gustos.
Hay lo mismo platos sencillos para compartir, que cortes y vinos europeos.
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¿Con qué empezar?
Somos explertos catadores de buenas ensaladas César. Y sí: te recomendamos la de Palmares, que te la hacen en la mesa y te la sirven al momento. También están el fideo seco, la tártara cantinera, la burrata o las palomitas de coliflor, que se acompañan de una salsa encacahuatada.
Un clásico del restaurante son los tacos, de los que destacamos el Ensenada, el de cola de res y el que va al pastor. Ojo: pregunta por el picor de cada una de las salsas que te sirven al centro.
A la brasa y especialidades en Terraza Palmares
Hemos disfrutado mucho el zarandeado de huachinango, que va directo a la brasa y se acompaña de dobladitas de queso con frijoles de la olla. También, de la cabrería y los camarones Cayena con polvo de chiles y limón asado.
Entre las especialidades, considera la lengua entomatada, el chamorro confitado con reducción de naranja y ensalada de nopales o los tuétanos a las brasas con peperonata y chimichurri.
Un par más: la milanesa de ternera cubierta con salsa verde, queso gratinado y aguacate, así como el chile en nogada de temporada. Es un manjar.
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Clinc, clinc, clinc
Para terminar bien, no dejes de probar el pastel tres leches con palomitas, ni el fondant de chocolate.
Pero ante todo, revisa bien y desde el principio la carta de drinks y de vinos. Tienen creaciones de la casa como el Palmares Spritz, la margarita de jengibre y el Gindarin.
Hay vinos de la casa por copa, así como botellas de España, Italia, Francia y Estados Unidos. Aunque si estás con antojo de algo un poco más potente, no olvides los mezcales oaxaqueños, ni los tequilas.
Siempre hay razones para hacer una parada en Ya sea que llueva o que esté el sol más radiante, siempre vas a comer y a beber bien ahí. Procura ir con espacio en el estómago, así como con una reserva previamente hecha, porque muchos ya saben los secretos que hoy te acabamos de contar aquí.
Dónde: Calle Durango 216, colonia Roma, CDMX.
Cheque promedio: $650 por persona.
