Un accidente que resulto en un gran descubrimiento dentro de los productos saludables. Se tiene registro del nacimiento del kéfir en la zona de Europa del este, donde pastores dejaron fermentar la leche de oveja sin conocer de los beneficios que contenía. Recibe este nombre gracias a la palabra turca ‘keyif’ que se entiende como sentirse bien. Conoce sobre ventajas que existen detrás del consumo de kéfir.
Por: Desiree Perea
¿Qué es en realidad el kéfir?
Para comenzar a entender este producto lácteo debes sabes que se refiere a dos productos. En primer lugar, son pequeños granos suaves que se forman a partir de bacterias y levaduras, las cuales al unirse con la leche (tanto de origen animal como vegetal) resultan es una bebida probiótica. Dicho resultado, conocido también como kéfir, tiene grandes efectos positivos en todo el sistema digestivo, incluso ayuda a cuidar de la flora intestinal para aquellas personas que sufren de reflujo.
Acerca de sus propiedades como alimento, una de las más importantes está relacionada con el sistema digestivo. El kéfir tiene efectos antiinflamatorios, por lo que puedes consumirlo cuando aparecen gases intestinales. De igual manera ayuda a activar el tránsito intestinal, así que puedes recurrir a el cuándo se sufre de estreñimiento. Por otro lado, es un gran producto para las personas de edad avanzada que requieren de fortalecimiento óseo.
El kéfir cuenta con probióticos que mejoran la absorción vitaminas y minerales tales como el calcio. De esta manera es posible mantener en buen estado la densidad de los huesos. Además, al ser bajo en grasa, puede entrar en la dieta de las personas mayor sin problema alguno. Al igual que en los productos alimenticios para deportistas, que requieren de energía sin aumentar la grasa en su cuerpo.
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El mejor aliado para cuidar tu cuerpo
Además de sus ventajas nutricionales, en cuanto al sabor se encuentra en un nivel neutro, por lo que podrás utilizarlo en platillos salados o dulces. Es posible preparar la bebida de kéfir con leche de coco, almendras o soya, en caso de llevar una dieta vegana y obtendrás el mismo resultado. Asimismo, es un producto amigable con las personas intolerantes a la lactosa.
Dentro de los postres, puedes sustituir las porciones de leche con el kéfir y darle un giro saludable a pasteles o panqués. También puedes utilizarlo para la preparación de rellenos cremosos o hasta en el betún para decorar. Es un gran ingrediente para comenzar el día, puedes acompañarlo con fruta, granola y miel o hasta en licuados. En cuanto a las opciones saladas, puedes preparar con kéfir dips o untables de alcachofa, ajo parmesano y más.
Ahora que conoces acerca del poder del kéfir, seguramente querrás comprarlo o incluso prepararlo por ti mismo en casa. Para tener tu propia producción de bebida de kéfir, utiliza la leche de tu preferencia y compra los granos que dejarás activar dentro de la leche en un lugar templado por 24 horas. Una vez listo, separa los granos y utilízalos en una nueva preparación. Recuerda almacenar el producto final en recipientes de vidrio para alargar su periodo de vida.
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