Si hay algo de lo que nos sentimos orgullosos, sin duda es de la comida callejera. Nada como encontrarse con un puesto de tacos o antojitos que no deja de servir comida. A simple vista, estos lugares son un espectáculo. En Querétaro, es posible calmar el apetito con una propuesta realmente interesante: las gorditas de migajas. A continuación, te contamos sobre el origen y anatomía de este clásico e histórico platillo.
Por: Desiree Perea
¿Qué llevan las gorditas de migajas?
El nombre de este platillo realmente no revela mucho y eso es parte de su magia. Las gorditas en su versión más simple son tortillas gruesas que se pueden rellenar con un sinfín de opciones. La versión de Querétaro son las gorditas de migajas y son toda una delicia. Sí o sí se utiliza masa de maíz, no hay más.
Pero, ¿qué son las migajas? Simple, son los sobrantes de carne que se obtienen durante la cocción de las carnitas. Al pasar mucho más tiempo dentro del aceite, se logra una textura crujiente. Lo ideal es picar este sobrante finalmente hasta casi pulverizarlo. Una vez listo, se coloca al interior de la gordita y se fríe en manteca o aceite.

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Aquí podríamos decir que las gorditas de migajas están listas, pero no podemos olvidarnos del elemento picante: una buena salsa. Dentro de esta categoría, podemos encontrar un sinfín de opciones; para este platillo en específico, lo ideal son salsas asadas con un buen punto de acidez.
La belleza de la comida callejera en México
Decir que tenemos un solo platillo mexicano favorito es una completa mentira. El universo culinario que distingue a México nos permite encontrar opciones que se disfrutan más en distintos momentos; algunos son exclusivos de ciertas celebraciones, mientras que otros se convirtieron exclusivos de un horario.
Querétaro es hoy por hoy un destino reconocido por su importante industria vinícola. Gracias a las condiciones climáticas, los viñedos encontraron un lugar seguro en la zona, sin embargo, no es lo único que pueden presumir. Aunque las gorditas son un antojito común en distintas partes del país, nada como las gorditas de migaja queretanas.

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Si, por más sorprendente que parezca, los antojitos mexicanos son completamente diferentes. Dependiendo del lugar donde se preparen, se realizan ligeros pero atinados cambios que hacen que la experiencia cambie. Las gorditas de migajas presentan un juego de texturas únicos; además, la fritura profunda también suma puntos a su favor.
Las calles de México se llenan de vida gracias a la comida que se encuentra en cada esquina. Dentro de esta categoría, podemos encontrarnos que delicias a las que difícilmente podemos negarnos. Esto no tiene nada de malo, disfrutar de un buen antojito de vez en cuando es parte de los placeres de la vida. Querétaro hizo una gran aportación con sus gorditas de migajas.
Hoy más que nunca debemos valorar el importante legado culinario de México. Si bien las puertas están abiertas para la cocina internacional, las propuesta nacionales tienen mucho que ofrecer. Un claro ejemplo son las gorditas de migajas; a simple vista no presumen gran cosa, ni tampoco tienen una presentación impecable, y realmente no lo requieren. Nuestra comida callejera nunca deja de sorprender.