Este crustáceo es uno de los más codiciados en el mundo. Si bien en el mar se reproducen en grandes cantidades, lo que hace a los percebes un producto caro es la dificultad para sacarlos del mar. Crecen en una ubicación específica, en la cual se requiere de cuidado especial y depende completamente de las condiciones en que se encuentre la marea. Tienen una forma peculiar, cubiertos por una caparazón duro y patas que terminan con una forma alargada y en punta.
Son ricos en vitamina B1, calcio, potasio, vitamina C y E. ¿Conocías sobre su existencia? Aquí te contamos acerca de su origen y un par de datos curiosos. Comenzando por le hecho de que son especies hermafroditas. Cuentan con ambos aparatos reproductivos, aunque eso no significa que puedan reproducirse por si solos. Esta capacidad les permite asumir el rol necesario para dicho proceso.
Por: Desiree Perea
Un tesoro de difícil acceso
En cuanto la leyenda que se conocía en la Edad Media, las personas lo asociaban con los gansos. Se hizo popular un relato que aseguraba que los gansos eran la versión de los percebes después de la metamorfosis. Como es bien sabido, en la religión a partir de finales de febrero y hasta principios de abril, los viernes no se permite comer carne. Es sustituida por carne blanca, específicamente por pescados y mariscos.
De esta manera, las personas de esa época se escudaban bajo esta leyenda para poder comer carne de ganso durante la cuaresma. Sin importar que fuera carne roja, pues en un principio los gansos habían sido percebes, es decir, un producto marítimo. Aunque nunca los sacaban del mar, todos creían que en realidad sólo estaban comiendo una versión diferente de este crustáceo tan difícil de conseguir.
Por otro lado, los profesionales que se dedican a obtenerlos para llevarlos hasta tierra se les conoce como percebeiro. Ellos son los encargados de emprender la búsqueda de los percebes para el consumo humano. Y sin duda es una tarea compilada, además de difícil. El peligro recae principalmente en la ubicación dónde crecen, pues está adheridos a grandes piedras conocidas como la zona de rompeolas. Cuentan con horarios específicos para poder llegar a las zonas deseadas, para lograr una captura segura para los que se dedican a ello.
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¿Cómo preparar los percebes?
Realmente los percebes pueden añadirse a diferentes preparaciones, ya sea algún caldo de mariscos o incluso a recetas con arroz como la paella. Toma en cuenta que es un producto alto en sabor marítimo, que muchas veces no es del agrado de todos. Así que puedes utilizar otros elementos para contrarrestar el sabor. Pero algo que si es de suma importancia es la limpieza y cocción de los mismos. Este último es el paso que debe perfeccionarse para obtener la textura adecuada.
Para ello necesitas de una olla profunda, llena de agua y sal, se requiere ¼ de taza por cada litro de agua. La cantidad de líquido depende del número de percebes a cocer. Una vez que el agua entre en el punto de ebullición, se añaden los percebes. Y se sacan de manera casi inmediata, requieren únicamente de 1 minuto como máximo. En caso de optar por la versión frita, se añaden una vez que el aceite esté caliente y taparlos inmediatamente, ya que cuentan agua en su interior.
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