La última cena, desayuno o comida es un ritual que se hace cuando el condenado a muerte esta a punto de ser ejecutado y se le ofrece la oportunidad de pedir su última comida.
Por Pamela Trejo.
El origen
Si bien este ritual no es una norma, dentro del sistema penitenciario se ha aplicado a los presos desde hace mucho tiempo.
En la Europa Medieval, (contrario a lo que hoy significa), era una forma en la que el prisionero hacía las paces con sus verdugos, como bien lo vemos representado en la Última Cena, en la que Jesucristo ofrece una comida para todos sus apóstoles, incluyendo a Judas.
Foto de canva.
En otra de las funciones de este acto y desde otra visión de la superstición, se decía que la calidad y el gusto por la última cena, correspondía a que la probabilidad de que el “fantasma” se le apareciera a sus verdugos, fuera poca.
No es hasta el año de 1924 que se introdujo esta ceremonia en el estado de Texas, al mismo tiempo en el que la horca cambiaba a una silla eléctrica.
En la actualidad Texas ya no permite este ritual, se les da a los prisioneros la misma comida estándar que otros.
En cambio, en Florida, se tiene un presupuesto de 40 dólares, en Oklahoma de 15 dólares y la última ejecución que se dio en Nueva York en el año 1963 se permitía cualquier tipo de cena.
La última cena de asesinos seriales
Existen varias leyendas de las últimas comidas de los condenados a muerte, pero sobre todo, lo que deja ver es que estos criminales generalmente buscan comer platillos que les recuerdan parte de su vida, sus experiencias, sus infancias y hasta en ocasiones, algo que representa su nueva vida o fe.
Ted Bundy
Theodore Bundy a sus 43 años lo condenado a muerte por una serie de crímenes violentos como violaciones, necrofilia y 35 asesinatos, su pena de muerte se dio en 1989.
Se le ofreció una cena que consistía en un churrasco, huevos fritos, papas a la francesa, pan tostado con mantequilla y mermelada, leche, café y jugo de naranja.
Foto de canva.
Víctor Feguer
Era un asesino convicto y fue el ultimo preso federal ejecutado en los Estados Unidos y la última persona ejecutada en Iowa en el año de 1963. Su ultima comida fue una aceituna, pues decía que un árbol de olivo nacería como símbolo de paz.
Foto de canva.
John Wayne Gacy
Entre los años 1972 y 1978 asesinó y violentó a 33 niños y adolescentes, no fue si no hasta 1994 lo llevaron a tomar la inyección letal a la edad de 54 años en Illinois.
Para su comida pidió una docena de camarones fritos, pollo frito de kentuky, beked and beans, papas fritas, una malteada de chocolate, una botella de coca cola y medio kilo de frutas.
Foto de canva.
Te puede interesar: La última cena. ¿Hay placer en la comida antes de morir?
Ronnie Lee Gardner
Este criminal robó en varias casas y tuvo un cargo por dos asesinatos, lo fusilaron a los 49 años de edad en el año 2010 en Utah.
En su última cena comió cola de langosta, pastel de manzana, helado de vainilla y un refresco. Por último pidió ver la trilogía del señor de los anillos.
Foto de canva.
Te puede interesar: ¿Cuál fue el último bocado de Pierre Arthens? Así se lee Rapsodia Gourmet
Thomas Treshewn Ivey
Fue condenado a muerte por matar a un empresario y a un sargento de policía, en 1993, a la edad de 34 años fue ejecutado con la inyección letal en Carolina del Sur en el año de 2006. Para su última cena pidió una dona y una malteada de chocolate.
Foto de canva.
