Por: redacción
Admitámoslo, a todos (bueno, a casi todos) nos encanta asistir a bodas por lo que esto implica, desde elegir la ropa que usaremos hasta disfrutar del menú elegido por los novios, el pastel y las bebidas.
Los pasteles de boda de Marina Sousa
Sin embargo, aunque suele haber temporadas en las que pareciera que cada fin de semana se casa alguno de nuestros familiares o amigos, éstas terminan.
La Boda Falsa: come, bebe y disfruta sin que nadie se case
Para eso se creó el concepto de “Boda Falsa”, una fiesta que se lleva a cabo como un matrimonio tradicional, pero sin ningún compromiso. Los novios son actores y su unión resulta realmente divertida.
El pasado 10 de febrero se llevó a cabo la primera celebración de este tipo en Guadalajara, con un total de 300 invitados.
Los asistentes fueron recibidos con un cóctel y posteriormente se sirvió una cena en tres tiempos, que consistió en una entrada a elegir entre ceviche de palmito y alcachofa o portobello asado con pimiento en salsa de tres quesos.
De plato fuerte hubo salmón con mermelada de chiles, servido en una cama de perlas al pesto verde con frituras de camote.
La segunda opción fue un medallón de cerdo con salsa de chile poblano, elote y espinacas; servido sobre una cama de puré de camote con un pincho de nopal relleno de requesón y flor de calabaza. Todo bañado con chutney de guayaba.
Y para finalizar, se ofreció: panna cotta de almendras y de guayaba, volcán de dulce de leche con nieve de pistache, creme brulee de vainilla y mousse de tres chocolates.
La decoración del salón de fiestas fue como la de una fiesta real, con flores y luces.
Después de la cena se realizó un brindis y se abrió la pista de baile. Además, se lanzaron varios ramos y ligas, cada uno con regalos, como viajes y pasajes de avión.
Si quieres ir a la siguiente Boda Falsa, mantente al pendiente de sus redes sociales (@labodafalsa), donde se dará a conocer la fecha y locación.