Sabemos que es tiempo de cuidarse y por eso queremos compartir contigo algunos consejos para cocinar más saludable:
Por: Adi Zeitelberger
Cocinar saludable no es tan complicado ni mucho menos aburrido, solo es cuestión de saber usar temperaturas, escoger técnicas o seleccionar los ingredientes adecuados. Pero no te preocupes, ya que a continuación te enlistamos cinco consejos que pueden ayudarte mucho a la hora de preparar la comida:
1. Procesa en la medida de lo posible tus propios alimentos
En ocasiones nos preocupamos más en si un alimento es orgánico o no, cuando lo que realmente debemos hacer es alejarnos de los ultraprocesados. Es por ello que cocinar tus propios alimentos desde cero siempre será la opción más inteligente y saludable.
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2. Blanquea tus vegetales
Una de las técnicas que nos ayudan a conservar mejor los nutrientes de nuestros vegetales es la de blanquear. Esto consiste en calentar agua a punto de ebullición junto con un poco de sal, posteriormente se agregan los vegetales y se dejan cocer por algunos minutos. Esto depende del tipo de vegetal: si son hojas son en menos de 3 minutos; de lo contrario, de 5 a 7 minutos. Al último se drena y se pasa por un baño de agua con hielos.
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Esto es para conservar la clorofila, inactivar enzimas y eliminar los sabores amargos. Es importante mencionar que para vegetales de hojas es una cocción completa, mientras que para los demás es una precocción. Después de eso puedes presionarlos y congelarlos para solo calentar con un poco de mantequilla o aceite de oliva así como las especias de tu elección.
3. Opta por los métodos de cocción húmedos
Este tipo de métodos de cocción son aquellos que necesitan un medio líquido para su cocción, los que te recomendamos son: hervir, blanquear, cocer al vapor y estofar, ya que utilizan menos cantidad de grasa y hacen que logran que el resultado sea más jugoso. Una buena idea, por ejemplo, es marinar pescado o pollo y cocerlo al vapor. Verás que quedará muy rico y no estará seco, ni aburrido.
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4. Las grasas también son saludables
Como bien sabes, no todas las grasas son malas; incluso las de origen animal. Solo es cuestión de tomar en cuenta las cantidades y sus temperaturas, así como el punto de humo de cada tipo de aceite.
En muchas ocasiones, basta con añadir una o dos cucharadas de aceite a lo que cocinamos. Realmente el aceite que te guste más es el mejor; por supuesto, también toma en cuenta que hay calidades y cada uno puede dar un beneficio diferente. Sin embargo, en la variedad es donde hay riqueza. Por lo que te recomendamos alternar este tipo de elementos.
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Si tú mismo cocinas tus alimentos, automáticamente dejarás de consumir grasas trans y saturadas. Recuerda que el aguacate siempre es un buen aliado, así como los frutos secos.
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5. Piérdele el miedo a la fritura profunda
Este método de cocción es del que más huimos a la hora de cocinar saludable; sin embargo, no siempre es tan malo si lo sabemos usar. Lo primero que debes de cuidar es la temperatura: 180 grados centígrados.
Si lo haces así, verás que el producto solo absorberá la grasa necesaria para quedar crocante, de lo contrario su contacto será más prolongado y así si tendrá mayor cantidad de grasa. Por otra parte, tienes que tener cuidado que el aceite no se utilice muchas veces, ya que puede ser nocivo a la larga.
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No tienes que ser un experto para cocinar saludable, solo es cuestión de poner manos a la obra y cocinar para ti y tu familia. Esperamos que estos consejos sean útiles para ti y que te ayuden a retomar aquellos hábitos saludables que en ocasiones olvidamos. Recuerda que lo rico nunca estará peleado con lo sano.
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