Recurrir al congelador como espacio seguro para almacenar alimentos no es nada nuevo. De hecho, es una alternativa popular para lograr que el tiempo de vida de la comida se extienda considerablemente. Aunque podría parecer una tarea fácil, descongelar es un proceso que muchas veces puede tomarse a la ligera y esto no debería pasar. Si no quieres comprometer la textura, sabor y nutrientes de tus productos; a continuación te revelamos las técnicas ideales, así como las especificaciones que requiere cada método.
Por: Desiree Perea
¿Por qué es tan importante descongelar la comida correctamente?
Más allá de enfocarnos en la textura o el sabor, es importante hacen énfasis en los efectos negativos que puede tener la temperatura al momento de descongelar alimentos en casa. Por nada del mundo realices este proceso a temperatura ambiente, es un error grave y el más común.
Elegir este método hace que los alimentos se expongan a cambios de temperatura drásticos. Esto provoca que las bacterias se multipliquen rápidamente, hasta alcanzar niveles peligrosos para el consumo humano. Todo se vuelve un desaste; la capa exterior es lo primero que se descongela y es el lugar donde la bacterias comienzan a atacar hasta llegar al interior.
Sin importar si después se van a calentar o cocinar los alimentos, la contaminación es evidente. Es por ello que es crucial conocer y aplicar métodos seguros; lo mejor es que existen y están completamente comprobados.
1. Agua fría
Este primer método suele ser más rápido que recurrir a la descongelación en refrigerador. Si piensas descongelar más de un alimento, puedes apoyarte de esta alternativa. Requiere de supervisión para cambiar el agua cada 30 o 40 minutos. Lo ideal es que el agua se mantenga fresca para evitar que se desarrollen las bacterias. Los alimentos deben colocarse dentro de bolsas plásticas con cierre hermético y sumergirse por completo.
Te podría interesar: Tips de cómo conservar hongos en casa: 5 tendencia efectivas
2. Microondas
Si estás corto de tiempo, descongelar alimentos en el microondas es una alternativa rápida y segura. Toma en cuenta que, una vez que inicia el proceso, la comida debe cocinarse en ese momento. Puedes recurrir a las funciones de descongelación especificas en tu microondas o bien, marcar intervalos de tiempo cortos. Asegúrate de girar la pieza entre cada periodo, así podrás asegurar que el calor llegue de forma uniforme.
3. Refrigerador
Este es el método más seguro y recomendado. Sin embargo, debes tomar en cuenta que es el más tardado; lo ideal es implementarlo desde una noche antes. También es importante tomar en cuenta la porción de comida o el tamaño de la carne, pues esto también puede tener efecto en el tiempo.
Los alimentos congelados deben colocarse dentro de un recipiente hermético o sobre un plato con borde en el nivel más bajo del refrigerador. La temperatura constante y fría del refrigerador evita que las bacterias ataquen y se propaguen en todo el producto.
Te podría interesar: 5 recetas de helado casero que puedes prepara sin máquina
Sin importar que método elijas, considera hacerlo en porciones pequeñas para evitar que el proceso tarde más tiempo. Como última observación, una vez que un alimento se ha descongelado, no debe volver a congelarse. Al finalizar todo el proceso, asegúrate de limpiar bien todas las superficies y utensilios involucrados; sobretodo si los alimentos estaban crudos. La planificación, la paciencia y el conocimiento son los mejores aliados en este útil proceso.
