La nogada es la salsa emblemática de los chiles en nogada, un platillo tradicional mexicano que se disfruta especialmente durante las fiestas patrias en septiembre. Sin embargo, su preparación puede ser un desafío, y cometer errores puede arruinar completamente el resultado final. En esta nota, te presentamos los errores más comunes al preparar esta salsa y cómo evitarlos para asegurar que sea siempre un éxito.
Por: Desiree Perea
1. No limpiar bien las nueces
Uno de los errores más comunes es no pelar adecuadamente las nueces de castilla. La cáscara fina que recubre las nueces puede impartir un sabor amargo a la nogada, además de que afecta en gran medida al color blanco característico. La mejor manera de ablandar la cáscara para hacer el proceso más fácil es remojarlas en leche caliente.
Posteriormente se dejan escurrir y enfriar ligeramente para poder empezar a pelarlas. Si bien puede que no queden completamente limpias, incluir este paso en el proceso ayudará a lograr un color más claro en la salsa la momento de integrar los ingredientes.
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2. Mala integración de los ingredientes
La textura de la nogada debe ser suave y cremosa. No licuar adecuadamente puede resultar en una salsa grumosa o demasiado líquida. Usa una licuadora potente y procesa los ingredientes hasta obtener una textura homogénea. Si es necesario, puedes pasar la salsa por un colador para eliminar cualquier grumo.
Una vez que retires los elementos sólidos más grandes, no los tires, ayúdate de un procesador de alimentos e integra al resto de la mezcla. También toma en cuenta que no debes batir mucho, así evitarás se separe al momento de servir. Debe mantener una textura pesada pero limpia.
3. No equilibrar los sabores
La nogada debe tener un equilibrio perfecto entre dulce y salado. Un error común es no ajustar adecuadamente estos sabores, resultando arruinar el sabor característico que todos amamos de los chiles en nogada. Prueba la preparación en distintos momentos durante el proceso, a medida que la preparas puedes evaluar y corregir sin que sea demasiado tarde.
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4. Temperatura de la nogada
El calor es el enemigo principal de esta salsa. Al incluir lácteos dentro de su preparación, un ambiente cálido fácilmente echa a perder el queso. Además de arruinar el sabor, es posible que aparezcan grumos que no son nada agradables. Mantén la nogada en un lugar frío hasta que vayas a servirla. Esto también ayudará a que la textura se mantenga firme.
¿Qué puede arreglar un nogada mal lograda?
Esta preparación puede ser difícil de dominar, sobretodo si es la primera vez conociendo la receta. Es de suma importancia reconocer la consistencia y textura que caracteriza a la nogada, solo así será posible replicarla en casa. El que sea una salsa espesa tiene gran utilidad al momento de cubrir el chile poblano relleno. A simple vista debe poder observarse una salsa limpia y tersa.
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Puedes optar por añadir más queso y nueces en caso de notar la salsa muy líquida. Por el contrario, si está muy espesa, lo mejor es añadir un poco de leche para que no pierda cremosidad. Siempre que se haga alguna corrección, es importante rectificar el sabor.
Preparar una buena nogada requiere atención a los detalles y evitar ciertos errores comunes. Estos consejos pueden ayudar a asegurar una salsa perfecta, un factor fundamental en un platillo icónico como lo son los chiles en nogada.
