El término “drunch” es algo que empezarás a ver en todas partes. ¿Tienes idea de lo que es? Se trata, nada más y nada menos, que de una combinación de “desayuno” y “almuerzo”. Y aunque no es tan común como el brunch, cada vez gana más popularidad como una opción para disfrutar de una comida entre la tarde y la noche. ¿Te animas a probarla?
El drunch se refiere a una comida que se sirve en las horas de la tarde o temprano en la noche, más cerca del horario del almuerzo que del desayuno, pero más tarde que el almuerzo convencional. Esto, a diferencia del brunch, que generalmente se toma entre la mañana y el mediodía.
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Un drunch típico puede incluir una amplia variedad de platos, desde opciones más ligeras hasta platos más sustanciosos, dependiendo de las preferencias personales y del lugar donde se sirva. Eso sí, debes saber que su versatilidad es de las cosas que más nos gusta de él.
¿Qué probar en un drunch?
Algunos ejemplos comunes de alimentos que se pueden encontrar en un drunch incluyen huevos preparados de diversas formas, sándwiches, bocadillos, tablas de quesos y embutidos. No obstante, también puede consistir en platos internacionales, como sushi o tapas, así como pasteles, tartas, helados o frutas frescas para satisfacer el paladar después de la comida principal.
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Además de la comida, los drunches suelen incluir una variedad de bebidas para acompañar la comida, que pueden incluir desde café y té hasta cócteles, vino, cerveza o refrescos, dependiendo del ambiente y las preferencias de los comensales.
¿Cuándo elegir un drunch?
En realidad, tú puedes comer lo que tú quieras, en el momento que lo desees. Sin embargo, debes saber que los drunches son especiales y te sugerimos que los tomes en los momentos más ideales, para que los disfrutes mucho más.
Los drunches son populares en reuniones sociales, como encuentros con amigos o familiares, así como en eventos especiales o celebraciones. Esta tendencia de combinar comida y bebida en un ambiente informal y social se ha vuelto cada vez más popular en muchos lugares, especialmente en bares, restaurantes y reuniones casuales.
El drunch ofrece una oportunidad para socializar, relajarse y disfrutar de una variedad de sabores y texturas en una sola experiencia gastronómica. Elige una mesa que te guste, rodéate de compañía que disfrutes mucho y entrégate a la comida. ¡La van a pasar muy bien!