Las nueces son frutos secos deliciosos y nutritivos que se disfrutan en todo el mundo. Entre las variedades más populares encontramos la nuez pecana y la nuez de castilla. Dos ingredientes que, a pesar de compartir algunas similitudes, presentan diferencias notables en sabor, textura, propiedades y aplicaciones culinarias. En esta nota, te contamos sobre las características que hacen única a cada especie.
Por: Desiree Perea
Anatomía que marca la diferencia entre la nuez pecana y la nuez de Castilla
Dos nueces favoritas dentro de los frutos secos que no pueden faltar en casa. Estas especies encuentran un lugar tanto en recetas dulces como saladas. El sabor neutro permite combinaciones únicas. Más allá del nombre, a simple vista podemos identificar las diferencias físicas frente a la nuez pecana y la nuez de Castilla. La primera tiene una forma alargada y ligeramente delgada. Tiene una cáscara que protege al fruto que suele ser ligeramente rígido, por lo que no requiere de tanto esfuerzo para su extracción.
Por otro lado, la nuez de Castilla está protegida por una cáscara dura, completamente redonda. Se requieren de pinzas especiales para poder romper la protección exterior, hasta llegar a la nuez en sí. Una vez que se tienen la nueces libres de cáscara, también es posible diferenciarlas por color. La nuez pecana es más oscura frente a la de Castilla.
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Después de analizarlas a nivel físico, podemos ahora adentrarnos en cuanto a los sabores. Ambas especies cuentan con un sabor neutral con notas marcadas que tienen presencia en diferentes platillos. Sin embargo, la nuez pecana tiene una textura cremosa frente a la nuez de Castilla. De hecho, por eso se prefiere para implementar en salsas o aderezos.
Los usos de la nuez de Castilla se encuentran en su mayoría dentro de la panadería salada. Aportan en gran medida a la intensidad de sabor de panes y panqués. Mientras que la nuez pecana se fusiona muy bien en postres con chocolate, como brownies o galletas. Incluso es posible caramelizarlas para disfrutarlas como un antojo dulce.
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Propiedades que encuentras en ambas especies
Podemos confirmar que estos tipos de nueces comparten beneficios en común. Sin embargo, es importantes aprender a reconocer su contenido nutricional, para poder definir si la nuez pecana o de Castilla es mejor de acuerdo a las necesidades de tu organismo. Por ejemplo, estos frutos secos contienen grasas buenas, pero nuez pecana es rica en grasas que ayudan al cuidado del corazón. Mientras que la nuez de Castilla contiene ácidos grasos que tienen efectos antiiflamatorios.
Por otro lado, son una fuente importante de proteínas. La primer especie tiene efectos directamente en el sistema digestivo. Es un gran aliado si estás dentro de un régimen alimenticio enfocado en bajar de peso. Pero puede recurrir a la nuez de Castilla si estás buscando alimentos ricos en proteínas. Funciona muy bien dentro de la alimentación vegana y vegetariana.
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Eso sí, también podemos encontrar vitaminas y minerales en común entre estas nueces. Ambas cuentan con un destacable porcentaje de hierro, calcio, magnesio y potasio. Asimismo, dentro de sus propiedades más apreciadas están los antioxidantes. Estos tienen efectos en el las células, así como el funcionamiento óptimo del cerebro.
Como snack entre comidas, elemento crujiente en ensaladas o ingrediente principal en postres o platillos salados, así de versátiles son estos tipos de nueces. La nuez pecana y la nuez de Castilla seguro se convertirán en tu mejor aliado. Ambas especies cuentan con grandes bondades para darle un toque diferente a tus preparaciones.