Un episodio más de Behind the Chef que permite conocer de manera diferente a chefs en nuestro país. Al frente del restaurante Balcón del Zócalo, se encuentra un artista que ha logrado reflejar esta habilidad para presentar platillos únicos. En esta nota, conoce sobre la segunda pasión del chef Pepe Salinas que sin duda tiene una gran conexión con la gastronomía.
Por: Desiree Perea
El lado artístico del chef Pepe Salinas
Consagrado como uno de los chefs mexicanos más importantes, ha revelado una habilidad más allá que la de liderar su propio restaurante. Antes de estudiar gastronomía, el arte fue la primera disciplina que llamó la atención del chef Pepe Salinas. Actualmente podemos comprobar este talento, pues está plasmado a la perfección en los platillos del Balcón del Zócalo.
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Detrás del chef en que se ha convertido, existe un artista que disfruta de pasar tiempo acompañado de un lápiz y papel. De esta manera, el chef Pepe Salinas deja volar su ingenio para trazar la anatomía de un festín de sabores. Dibujar y pintar son para él una forma acertada de trazar historias o expresar vivencias propias.
Gracias a esta segunda pasión, el Balcón de Zócalo se ha convertido en un espacio que permite a la gastronomía convertirse en verdadera obras de arte. Cada platillo se diseña en función a la temporalidad, textura y hasta colores. Todo con el objetivo de ofrecer un plato atractivo no sólo al paladar, si no también a la vista.
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Arte y gastronomía trabajando en equipo
Más allá de ser un pasatiempo, el chef Pepe Salinas ha encontrado una manera de unir en un mismo espacio ambas pasiones. El arte puede representar un sinfín de cosas, además de funcionar como un lenguaje universal. Sin embargo, dentro de Balcón del Zócalo, la pintura y el dibujo es la parte creativa más importante para dar paso al menú de cada temporada.
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De esta manera, es posible encontrar una historia detrás de cada platillo. El chef Pepe Salinas se toma el tiempo necesario para dejar volar su imaginación. A través de su conocimiento gastronómico, puede plasmar en lienzos un plato profundo. Y una vez que llega el momento de materializarlo, tiene lugar otro momento de arte. Que si bien deja a un lado la pintura y los pinceles, los alimentos son una gran forma de lograr grandes creaciones comestibles.
