Recurrir a tés e infusiones para mantener al cuerpo hidratado nunca es mala idea. De hecho, para aquellos que buscan que el agua simple sea más atractiva, estas opciones son perfectas. Dentro de este universo, el té de jamaica se mantiene como una alternativa popular.
Más allá del sabor o la versatilidad de uso, los beneficios que concentra se convierten en la principal razón por la que las personas dedican agregarlo a su dieta. A continuación, te contamos sobre el poder detrás de esta bebida natural; que además, es fácil de encontrar en el mercado y así, prepararla tú mismo en casa.
Por: Desiree Perea
¿Qué tan ciertas son las propiedades del té de jamaica?
Antes de adentrarnos en sus efectos, vale la pena conocer un poco sobre el tesoro natural que le da vida a esta bebida. La flor de jamaica también se conoce como Hibiscus sabdariffa, es una especie que podemos agradecerle a África. Las primeras infusiones que se prepararon, permitieron revelar su importante efecto digestivo. El té de jamaica tiene los siguientes efectos:
- Propiedades diuréticas
- Laxante natural
- Reduce inflamación
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Además de sus beneficios para el sistema digestivo, el té de jamaica concentra una cantidad importante de antioxidantes. Para aquellas personas que sufren de hipertensión, esta bebida natural es un gran aliado dentro de su régimen alimenticio. Otro efecto a nivel cardiovascular se concentra en su poder para reducir el colesterol y los triglicéridos.
Para las personas que buscan mejorar su rutina de sueño, el té de jamaica es una alternativa popular para sustituir el café. De hecho, se aprecia mantiene como una bebida nocturna favorita gracias a sus efectos calmantes.
Claves de preparación que todo amante del té debe saber
Preparar un buen té requiere de atención al detalle. Así como ocurre con el café, uno de los pilares al momento de preparar estas bebidas está en la temperatura del agua. Es crucial asegurarse de que el agua mantenga una buena temperatura; si está muy fría, las propiedades y sabores no se liberan, pero si está muy caliente, las hojas se queman y los beneficios que concentran se pierden por completo.
Tanto el té de jamaica como otras opciones deben consumirse al momento. Esto no quiere decir que debas beberlo rápido, pero es importante no dejar que pasen más de 2 horas. La regla del tiempo también aplica al momento de prepararlo; lo ideal es preparar esta bebida en el momento en que se piensa consumir.
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Algunas personas prefieren hacerlo desde la mañana e incluso, desde una día antes, pero es importante señalar que no es lo correcto. Con el paso del tiempo, el té de jamaica pierde sus propiedades; si dejas pasar mucho tiempo, puede que simplemente estés consumiendo un agua saborizada sin efecto alguno.
Para esta temporada de calor, puedes optar por preparar el té y dejarlo enfriar por unos minutos para poder agregar hielo al gusto. Como tip, considera una porción extra de hojas de jamaica, así evitarás que pierda sabor al preparar el té frío.
Disfrutar de una taza de té de jamaica por la mañana o en la noche es una decisión inteligente. Además de aumentar tu consumo de agua, estarás llenando al organismo de vitaminas y minerales fundamentales para su funcionamiento óptimo.
