Una salsa cremosa puede tener éxito o arruinarse por completo en cuestión de segundos. Sabemos que es una preparación común, sin embargo, los errores se pueden presentar incluso con chefs expertos. Pero, ¡no todo está perdido! A continuación, te compartimos las soluciones más efectivas para rescatar tu salsa.
Por: Desiree Perea
Errores comunes en una salsa cremosa
Al cocinar en casa, existen ciertas recetas que se vuelven favoritas para el menú de la semana. Las salsas cremosas pueden aportar de manera positiva a un sinfín de platillos; desde una pasta hasta un corte de carne o guarnición. Prepararlas no es nada del otro mundo, sin embargo, esto no quiere decir que los errores no se presenten durante el proceso.
Una buena salsa cremosa requiere del equilibrio entre el líquido y los agentes espesantes. Añadir más o menos de cierto ingrediente, puede resultar en un desastre total. Lo ideal es que la salsa tengan una buena capacidad de cobertura. La cocina requiere de gran precisión, las porciones jamás deben tomarse a la ligera.

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Los errores al cocinar pueden presentarse inesperadamente. En el caso de una salsa cremosa, estas son las razones por las que la consistencia se ve afectada:
- Exceso de líquido
- Poco tiempo de cocción
- Emulsión mal lograda
- Bajo efecto de agente espesante
Así puedes devolverle la consistencia a tu salsa
- Maicena o harina de trigo
Recurrir a estos ingredientes es una práctica común gracias a su gran efectividad. Es importante ejecutar el proceso con la mayor atención al detalle. La maicena o harina deben mezclarse en frío, con agua o con un poco de la salsa. Una vez que está perfectamente mezclado, entonces podrás incorporar esta solución al resto de la salsa. Posteriormente, debe calentarse la salsa para lograr que estos agentes espesantes cumplan su función.

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- Evaporación
Este es el método más natural y el mejor para intensificar el sabor. Es importante señalar que esta solución toma tiempo; depende de la cantidad de líquido que necesites reducir. La salsa debe colocarse en una olla y mantener el fuego en nivel medio. La supervisión es clave para evitar que espese de más o que se pegue en el fondo. Como tip extra, termina de sazonar hasta que la salsa tenga la consistencia correcta; si lo haces antes, puede que al concentrarse, el punto de sal sea muy alto.
- Queso crema o crema ácida
También puedes recurrir a los lácteos concentrados, funcionan a la perfección para las salsas cremosas. El alto contenido de grasa ayuda a espesar la salsa mientras añade un sabor cremoso. Este proceso requiere calor para lograr un buen resultado. Al final, no olvides probar la salsa para ajustar la sal y especias; aunque no se requiere una gran cantidad, puede que el sabor se pierda ligeramente.
Preparar una salsa cremosa en casa no tiene por qué convertirse en una pesadilla. Aunque al principio podría parecer un desastre, no hay por qué entrar en pánico, todo tiene solución. Antes de pensar en desechar la preparación, aplica alguna de estas opciones, todas funcionan. De esta forma, podrás acompañar un filete o una exquisita pasta con una salsa tersa y con buena consistencia.