El más nuevo proyecto de la chef Liz Galicia nos hizo salivar mucho: Salón Mezcalli es, sin duda, de nuestros nuevos imperdibles en México.
Cuando entras a Salón Mezcalli, lo primero que asombra es su imponente remate visual: una enorme pared de muros limosneros antiguos, con dos arcos que resguardan más de 160 diferentes botellas de mezcal. Esa es la esencia del lugar,
Por Amílcar Olivares.
Con ese inicio, que hace comenzar a salivar por con el elixir mezcalero, ya se comienza a entender cuál es el concepto gastronómico que propone la chef Liz Galicia. Este lugar, que es su más nuevo proyecto, sin duda exalta su proyecto más personal: una mezcalería y antojería poblana contemporánea que respeta la raíz de las recetas tradicionales, pero lo lleva a nuevos niveles de modernidad. En todo el concepto, el maridaje con mezcal es rey.
Mezcalli se ubica al interior del nuevo y sofisticado hotel boutique Cartesiano, y es un homenaje a las 3 M´s que tanto nos gustan: mezcal, maíz y mole. Combinación que, al final del día, logra el que es su lema: “Alimentamos el cuerpo y curamos el alma”. Les anticipamos algo cardinal: sílo logra.
Te podría interesar: La historia del mole de caderas.
¿Qué comer y beber en Salón Mezcalli?
Como sabemos, la chef Liz Galicia estuvo muchos años al frente de los fogones de uno de los más tradicionales restaurantes de Puebla: El Mural de los Poblanos, donde perfeccionó su técnica en la cocina tradicional de este estado. Ahora, en Salón Mezcalli lleva esa tradición a otros niveles.
Sin duda te recomendamos empezar por el mezcal. Toda la carta está pensada para que los platillos propuestos puedan ser maridados con la amplia oferta de esta bebida.
Si bien en la barra dominan los mezcales de Oaxaca, que sorprenden por su enrome cantidad de agaves silvestres ofrecidos, puedes también sorprenderte con mezcales de Puebla, Michoacán, Guerrero, San Luis Potosí, Tamaulipas o Jalisco. También, recomendamos acompañar el destilado con alguna de las propuestas de cerveza artesanal local con las que cuenta.
Una vez con mezcal y cerveza en mesa, recomendamos comenzar con los antojitos: su guacamole con chapulines y chicharrón con carne y pipicha, así como sus tlacoyos de maíz azul, chicharrón prensado y chile serrano tabaquero; su tamal de mole poblano o su tostada de fideo seco.
Pero sin duda, una de sus joyas de la corona es la clásica cemita de chalupas, que puede ser acompañada de res o pollo y la puedes escoger de mole poblano y de salsas rojas o verdes.
Ya para los fuertes, recomendamos su mole manchamanteles –un mole dulce muy particular de esta región, con frutas y semillas– con pork belly; el tradicional mole poblano, donde la chef le da un toque personalísimo que lo hace único o su rib eye con cremoso de quelites, que le da un giro al sabor tradicional de la carne; o sus “tortillas enchiladas” rellenas de pollo y que pueden ser de mole, manchamanteles o pipián (te recomendamos una de cada una).
Si lo que se te antoja es una típica cemita, aquí podrás encontrar una amplia variedad de rellenos como con carne árabe, pipián verde, pata de res en vinagre o milanesa.
Te podría interesar: De caracoles y escamoles, conoce la historia de estos ingredientes.
Lo dulce, el café, los digestivos…
Mención aparte merece también el menú especial de dulce que ofrece Liz Galica, pues tiene sección de cafés regionales de Puebla para terminar. También cuenta con una muy interesante propuesta de licores locales tradicionales para maridar con los postres o simplemente para terminar con un digestivo.
De los postres nos fascinó su flan de galletas con “licor de pasita” –otro de los íconos de Puebla. También su empanada de xoconostle y frutos secos caramelizados y su tamal de chocolate especiado con helado artesanal de té limón, amaranto y frutos rojos que, además, visualmente es una belleza.
“Alimentamos el cuerpo y curamos el alma”. Después de que prueben Salón Mezcalli, ustedes nos dirán si les pasó como a nosotros, que salimos bien curaditos del alma y con el deleite en el paladar.
¿Qué nos gustó más?
La cemita de chalupas de mole, maridado con un mezcal poblano de agave pichometl.
Fun fact
La chef juega todo el tiempo con los sabores y las combinaciones, así que atrévete a probar los diferentes moles o antojitos en un mismo plato y combínalos.
Tip
Pregunta por sus degustaciones de mezcal, te sorprenderá la riqueza y variedad de sabores que puede tener un mezcal de una misma región o lo diverso que puede saber un mismo agave dependiendo la zona.
Dónde: Calle 3 Ote. 610, Centro de Puebla, dentro del Hotel Cartesiano.
Cheque promedio: $500 a $600 por persona.
IG: https://www.instagram.com/salonmezcalli/,
BOLETOS