No necesitas ser un experto repostero para preparar postres deliciosos. En ocasiones con pocos ingredientes y tu imaginación puedes lograr recetas como las siguientes:
Postres con fruta
La fruta siempre es deliciosa y la podemos comer durante el desayuno. Sin embargo, te recomendamos darle la vuelta y hacer que resalte su sabor convirtiéndola en un postre fresco y delicioso. Por ejemplo: piña asada con helado de mango o queso mascarpone, miel y nueces; duraznos caramelizados con crema de rancho y pistaches; fresas salteadas con vinagre balsámico, miel y especias; o mango en almíbar con canela y crema de almendras.
Te podría interesar: Tres recetas de cultura pop para preparar en casa
Postres horneados
Este tipo de postres son los más fáciles de preparar. En un molde de cerámica o vidrio del tamaño de tu elección, coloca fruta, un poco de azúcar mascabado, especias y mantequilla. Después hornea y sirve con helado, crema o miel.
Si te quieres ver más profesional puedes preparar un crumble de mantequilla. Debes mezclar en cantidades iguales, harina y mantequilla, además de una pizca de sal y especias (puede ser canela, nuez moscada, pimienta, menta), y listo; con ayuda de tus dedos forma una masa grumosa, como si fuera arena mojada. Esa masa se coloca encima de la fruta (duraznos, manzanas, higos), se hornea hasta que dore a 180°C .
Te podría interesar: La dulce y triste historia de las gorditas de nata
Postres en microondas
Sin duda la moda de los postres en microondas crece constantemente, esto debido a que puedes preparar postres más complicados en un solo recipiente y sin sufrir tanto. Un claro ejemplo son los cupcakes en taza. Estos son muy fáciles de preparar y necesitas solo cuatro ingredientes: harina huevo y el sabor de tu elección que puede ser chocolate, fresas frescas, plátano, entre otros.
Primero necesitas una taza amplia y de cerámica, la cual se cubre con mantequilla. Ya listo haces tu mezcla en la taza: si es un pastel de chocolate necesitas agregar el huevo, una cucharada de harina, una de cocoa y un poco de miel o azúcar. Mezcla perfectamente y deja cocinar un minuto.
Puedes usar crema de avellana, plátanos frescos, queso, fresas o frutos rojos y hasta matcha.