Por: Myrna I. Martínez
Lo primero que escucha la chef Beatriz Vázquez al despertar es el romper de las olas del Océano Pacífico en el puerto de San Blas, Nayarit. El mar ha marcado su vida y su profesión, razón por la que le gustaría ser recordada con la frase “Sabor a mar”.
La chef Betty, como se le conoce cariñosamente en el programa MasterChef México, es originaria de Tepic, pero, desde hace 37 años vive en el puerto donde puedes probar sus creaciones en el restaurante El Delfín, ubicado en el Hotel Garza Canela, propiedad de su familia desde 1970.
Ese sabor a mar es el que ha marcado su cocina con ceviches, mariscos y pescados frescos, obtenidos por los pescadores que cada madrugada se internan en el océano con maestría.
Cada domingo, la chef Betty se convierte en Trending Topic por su participación en MasterChef México, que actualmente transmite su sexta temporada por TV Azteca. En diversas entrevistas ha manifestado sentirse agradecida por tantas manifestaciones de cariño que recibe de los seguidores del programa.
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Frente a las cámaras, la chef ha inspirado a nuevas generaciones de cocineros y de amantes de la cocina a trabajar arduamente por su sueños; y fuera del programa difunde la cocina y tradiciones de Nayarit como embajadora gastronómica de su estado… su trayectoria y su pasión por la cocina van más allá del éxito del programa.
Su primer acercamiento a la cocina fue de pequeña, de la mano de su abuela, quien le enseñó a respetar los ingredientes, los tiempos de preparación y el amor a la cocina. Le enseñó a venerar el ritual que surge alrededor de los fogones y de la mesa al momento de consumir los alimentos. Para la chef, la comida da muchas alegrías y puede sanar muchas tristezas.
La chef recuerda en una entrevista, realizada para Mesa para dos, que el primer platillo que preparó con su abuela fue la mermelada de guayaba. Betty se subía a los árboles a cortar las guayabas, y, con destreza, las arrojaba hacia un canasto. Su abuela le enseñó ser una mujer valiente… y esa valentía la llevó a recorrer todo el país de “mochilazo” antes de cumplir 18 años.
A principios de la década de los 80, tras estudiar la carrera de Control Aéreo y Aviación, se dio cuenta que a su vida le faltaba el ingrediente que marcó su niñez: la cocina, así queincursionó en la hotelería hasta que logró juntar para estudiar en el reconocido Le Cordon Bleu, de
La chef Betty regresó a su amado Nayarit para dedicarse de lleno a los fogones de El Delfín, donde integra técnicas francesas y mexicanas para ofrecer novedosas creaciones con frutos frescos de San Blas, lugar al que ama y por el que ahora solicita ayuda urgente tras el embate del huracán Willa.
