Los cuentos son de las narraciones más populares en el mundo. Esto se debe a su renovación técnica y diversidad temática, la cual va desde viajes a la luna hasta relatos sobre comida. ¿Ya conocías estos cuentos que unen al mundo de la gastronomía y el de la literatura?
Por Sandra Carolina Jiménez Pedroza
Escritores de todo el mundo hicieron de la comida el punto focal de algunos de sus más famosos cuentos; es decir, no se limitaron a mencionarla, sino que la volvieron el motor de la trama o parte clave en el desarrollo de sus personajes. Por ello, aquí te presentamos cinco cuentos con esta temática:
“Bajo el sol jaguar”, de Italo Calvino
“Bajo el sol jaguar” es un cuento que está dedicado al sentido del gusto y narra la historia de un matrimonio de visita en Oaxaca para degustar la comida típica de la región.
Sin embargo, mientras Olivia disfruta cada bocado, su esposo es incapaz de experimentar sensación alguna, aumentando así la brecha en su relación que se elimina cuando ambos deciden devorarse uno al otro en señal de hambre y deseo.
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“Las cerezas”, de Emilia Pardo Bazán
En este texto el protagonista es un párroco, quien al observar cerezas recuerda un evento traumático de su pasado en el cual casi comete un pecado. Esto, según él, sucede gracias a su rival, quien lo tienta a comer el fruto para luego obligarlo a dar misa el día del Sacramento.
Y en ese momento el párroco se enfrenta a un conflicto moral.
Por un lado, si realiza la misa sin haber ayunado caería en pecado; por otro, si no lo hace, podría morir a manos de los parroquianos.
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“Deterioro”, de Eva María Medina Moreno
Aquí la narradora, luego de cenar con su marido, se queda absorta contemplando las migajas de pan del plato de él.
Una, le recuerda a sí misma, hinchada con desechos; la otra, seca y sin vida, a su esposo. Posteriormente, su interpretación cambia y ella se percibe como la migaja que perdió su “esponjosidad y sabor”, mientras que él es reseco.
No obstante, al final nada de eso importa. Ambos son migajas de pan que se consumen, “cada una a su manera”.
“Los alimentos terrestres”, de Juan José Arreola
Ubicado en la España de los Siglos de Oro, la historia gira en torno a un hombre —Luis de Góngora— suplicando sus alimentos por medio de cartas —de las que sólo vemos fragmentos—, en las cuales también habla de sus dificultades económicas y de cómo éstas le impiden tener una vida sin preocupaciones.
Asimismo, en este cuento se aprecia un protagonista desesperado por sobrevivir, pero también con la fuerza para denunciar a la élite de la época.
“La gran comida”, de Bertolt Brecht
Pese a la brevedad del texto, Brecht logra crear personajes memorables. Estos son una pareja extremadamente avara que pasa toda su vida en la austeridad… hasta que fallecen. Momento en el cual se organiza una cena fúnebre; sin embargo, el autor deja en duda si el dinero para hacerla fue obtenido por medio de una colecta o de los bienes del matrimonio.
Sea como sea, ni marido ni mujer disfrutaron jamás de una comida abundante, pero sí de ser excelentes anfitriones.
La ruta fantástica de los cuentos en Alemania
Estos cuentos son sólo una probadita del maravilloso vínculo entre literatura y gastronomía… ¿Tú ya los conocías?