Cada vez es más común escuchar hablar de agricultura a pequeña escala en las mayores ciudades del mundo. Y no es fortuito. Tener un huerto urbano en casa podría ser el primer paso de acostumbrarnos a producir nuestra propia comida, con miras a un futuro con posible desabasto de alimentos.
Hoy te contamos tres razones por las que deberías considerar tener uno propio.
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) asegura que los huertos urbanos pueden ser mucho más ecológicos y eficientes que los tradicionales, llegando a producir anualmente por metro cuadrado hasta 20 kilos de alimentos.
Pero, ¿exactamente en qué consisten?
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La naturaleza de un huerto urbano
Se trata de espacios al aire libre, o de interior, destinados al cultivo de verduras, hortalizas, frutas, legumbres, plantas aromáticas o hierbas medicinales, entre otras variedades, pero a escala doméstica.
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Estos cultivos brindan una mejor salud
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Hoy en día se comienzan a considerar las nuevas “manchas verdes” dentro de grandes metrópolis y, aunque principalmente esta actividad es realizada como pasatiempo, podemos considerarla como una gran alternativa para el cuidado de nuestra alimentación y, por ende, nuestra salud.
Los huertos urbanos, permiten la producción de alimentos a pequeña escala. Esto da pauta a una producción totalmente controlada, orgánica y saludable, pues no es necesario añadir pesticidas industrializados, o estimulantes artificiales. Esto da como resultado una cosecha 100% limpia.
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Tienen mejor sabor
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Los alimentos que son producidos mediante esta actividad pueden aportar un nivel de nutrientes mayor al de los alimentos que son cosechados a grandes escalas. También es importante mencionar que el sabor que aportará a los alimentos preparados con estos ingredientes, será mucho más puro y potente.
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No son tan difíciles de mantener
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A simple vista puede parecer una actividad compleja; sin embargo, la realidad es diferente.
Puedes comenzar con una pequeña maceta en el patio, terraza, balcón o techo de tu casa, pues existen diferentes alimentos que no requieren grandes espacios y son fáciles de cosechar.
Puedes comenzar con algunas semillas que tengas en casa, como pueden ser de jitomate, frijol, lentejas o limón y aun mejor, ¿por qué no animarse con un proyecto familiar?
La alimentación hoy en día es de suma importancia, por lo que un huerto urbano reporta ventajas no solo para consumir comida saludable, sino también rica en nutrientes y libre de químicos.
Come sano, come saludable, consume urbano. Y desde ahora, hazlo desde casa.
