Desde las clásicas causas de Perú, hasta pescas del día en escabeche: así es como se come japonés y peruano en Poema restaurante.
Spoiler alert: Poema es un lugar efímero y solo podrás visitarlo desde hoy y hasta el 15 de mayo, en la CDMX. Justo esta característica efímera es lo que lo hace tan especial. El restaurante busca que cada sabor, detalle, aroma y hasta sus jardines y arquitectura, sean un recital para los sentidos.
Por Amílcar Olivares
Poema restaurante es el nuevo concepto high-end, a manera de pop-up, que Grupo Fisher´s ha traído a México. Su propuesta gastronómica consiste en platillos nikkei, a cargo del chef de origen griego Thanos Stasinos, acompañada de una carta especial de mixología para maridaje, diseñada por el ateniense Enriko Nektarios.
La comida y bebidas están enmarcadas en un entorno influenciado lo mismo por el minimalismo japonés, que por un colorido peruano especial, dentro del jardín de la casa Torreblanca –o Fideicomiso Plutarco Elías Calles, en la colonia Condesa–, considerado Patrimonio Cultural de la México.
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Para comenzar, te recomendamos sus ceviches, el sello de la comida nikkei. Prueba el de salmón con algas wakame, o el de lubina con camote y auténtico maíz choclo peruano. También recomendamos sus causas, platillo típico de Perú, o su tiradito de atún con salsa fresca de wasabi.
Sin duda, la joya de la corona de las entradas es su nigiri de foie gras con salsa dulce de soya y mirin.
Para los fuertes, te sugerimos los platos a la parrilla. Nos encantó la pechuga de pato en salsa de trufa y miso, y su lubina chilena con escabeche de kimchi. También puedes compartir su corte ibérico pata negra de bellota.
Lo que hicieron en Poema es que, en vez de servir la pata de esos cerdos famosos por ser ideales para jamón, es que los ofrecen como chuletas con hueso: la suavidad y distinción de esos cerdos belloteros a las brasas, es única.
Los postres te van a parecer bastante cercanos. Te sugerimos irte por su crema de chocolate caramelizado con galleta de cacao y helado de caramelo salado.
También, para el toque japonés, recomendamos su crema de té verde matcha con maracuyá y sorbete de coco. Acompaña de café o un carajillo.
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En Poema, lo más importante es el maridaje. Para ello, la coctelería diseñada por Enriko Nektarios, mejor conocido como Aquaman, es ideal.
Desde luego, los pisco sour peruanos, son los que reinan. Prueba el de la casa, que lleva esencia de limón fresco con gotas de Angostura y aquafaba. Su yozu sour lleva jengibre natural, puré de yuzu y licor japonés de ciruela. También el Le Jardin con pisco, licor de violetas y jarabe de lichi.
Sin duda el ambiente y el lugar en sí mismo. Estar en el jardín de una mansión de estilo art- deco, rodeado de árboles, sombras y flores, te transporta a un lugar sumamente poético.
Aunque este proyecto es de comida peruano-japonesa, en realidad es originario de Grecia: la idea de Poema surgió a partir de un viaje a ese país que realizaron en 2019 Manolo Ablanedo y Charles Hamparzumian, directivos de Fishers, en el que conocieron a George Konstantinou, creador y director ejecutivo de Poema.
Para ir a Poema, forzosamente tienes que ir con reservación. Ésta la puedes hacer a través de su concierge electrónico, pues sólo abren de jueves a domingo.
Dónde: Guadalajara 104, Condesa, CDMX.
Horario: Jueves a domingo, de 13 a 21 horas.
Cheque promedio: $1,500 por persona.
IG @poemamx