Hoy en día, Forte dei Marmi es sinónimo de elegancia y sofisticación. Fue Michelangelo quien llamó la atención por primera vez a la zona a principios del siglo XVI, cuando Forte dei Marmi era principalmente un pequeño pueblo con un puerto que se utilizaba para enviar el mármol blanco de Carrara a destinos de todo el mundo.
Por Deby Beard.
La materia prima se usó para esculpir muchas de las obras de renombre del artista, incluido David. Fue fundamental en la creación de la Via del Marmo, la ruta que unía Carrara con el puerto y se enamoró de la ciudad.
A poca distancia se encuentra la ciudad renacentista de Lucca, o Pietrasanta (“città d’arte”), con su encantador barrio de arte antiguo, que alberga exposiciones de arte al aire libre y galerías de bellas artes; Pisa, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, y los fabulosos cinco pueblos costeros de Cinque Terre en Liguria.
Es aquí, entre la fina arena blanca de la costera y las sinuosas colinas de la toscana, que nos encontramos con un joya hotelera que forma parte de The Leading Hotels of the World – una maravillosa colección de hoteles de lujo independientes, únicos y poco comunes que nos sumergen en los destinos más mágicos del mundo.
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Principe Forte dei Marmi, inaugurado en julio de 2010, es un edificio moderno diferente a cualquier otro en la ciudad. El hotel brinda una sensación inmediata de espacio, impregnada de luz natural. Los materiales son madera, piedra natural, textiles neutros, cuero y sobre todo vidrio, para crear un efecto de transparencia, el resultado es un ambiente refinado y un confort elegante.
La intimidad es lo que hace que los viajeros nos enamoremos del Hotel Principe Forte dei Marmi. Las 28 habitaciones tienen un aire de sofisticación con una personalidad única y están elegantemente decoradas por reconocidos diseñadores italianos.
Un edén culinario, en Principe Forte dei Marmi se encuentra el famoso restaurante Lux Lucis, galardonado con una estrella Michelin. Lux Lucis especializa en cocina regional contemporánea, servida en el ambiente íntimo de una terraza panorámica. La mente brillante detrás del arte culinario del restaurante es el chef Valentino Cassanelli, quien nació cerca de Módena, tierra de gran tradición culinaria.
Las creaciones del Chef son una expresión libre de la cocina italiana, con una creatividad desenfrenada, extraída no solo de sus propias experiencias de vida, sino también de la rica biodiversidad que rodea la ciudad costera de Forte dei Marmi.
La inspiración también proviene de su estrecha colaboración con Maître Sommelier Sokol Ndreko, con platos que a menudo comienzan con el perfil de sabor de vinos particulares. El resultado son menús delicadamente equilibrados y elegantes, que viajan felizmente de tierra a mar y ofrecen los mejores ingredientes de temporada.
