Conoce las características de esta fruta y sus usos en la cocina y la cosmética
La bergamota es una fruta de color amarillo que asemeja a una naranja. Su sabor es muy ácido y por este motivo la pulpa no es tan popular en la cocina, sin embargo, la cáscara se utiliza en aceites para el mundo de la cosmetología, aromaterapia y tratamientos medicinales.
USOS
Infusiones: Por ser un fruto muy aromático es pieza indispensable para preparar infusiones frías o calientes, es muy popular para el famoso té británico Earl Grey o Lady Grey, que comúnmente se consume durante la hora del desayuno.
Aceites esenciales: El uso más popular para la bergamota es para realizar aceites que se utilicen en aromaterapia o aceites corporales.
Desodorante natural: La bergamota tiene un aroma muy fresco y dulce, por esa razón es muy solicitada para crear lociones, perfumes y desodorantes.
Entre las muchas propiedades que posee la bergamota podemos encontrar que es rica en vitaminas A y C, potasio, fósforo, hierro y sodio. Entre sus múltiples beneficios, también podemos encontrar que es excelente revitalizante, antidepresivo y antiséptico.
Revitalizante: Colocar un poco de aceite en un humidificador ayudará a que los aromas de la bergamota produzcan una sensación de bienestar y ayuden a levantar el estado de ánimo. Además de disminuir la ansiedad y la depresión.
Cura el insomnio: Un remedio natural para esas noches en las que no podemos dormir, es beber una infusión de bergamota antes de acostarse o colocar unas gotas de esencia durante la ducha.
Ayuda a la memoria: Beber continuamente una infusión de bergamota será muy beneficioso para la salud gracias a su alto contenido de hierro y al fósforo que este fruto posee.
Es un excelente cicatrizante: Gracias a sus propiedades antisépticas la bergamota tiene una potente acción antibacteriana y desinfectante.