La comida griega es deliciosa y llena de historia. Éste es un recorrido por los platillos más emblemáticos y dónde disfrutarlos en la CDMX
Del Olimpo bajaron no sólo la sabiduría, el amor y el fuego: también llegó un exquisito legado culinario. La comida griega es una de esas joyas un tanto ocultas para nosotros pero que bien vale la pena descubrir.
Por Michelle López – @Mich_Lv
Es probable que al principio tu paladar se sorprenda un poco y que resientas la falta de picante o sal, pero no te preocupes: la comida griega es gentil y generosa, y pronto te sentirás como en casa.
Al ver la carta de un restaurante griego, puede resultar confuso ver platillos que relacionamos más tradicionalmente con la cocina árabe: baklava, jocoque, dolmas, entre otros. La causa de esto es la directa proximidad geográfica de las islas griegas con Turquía – incluso puedes tomar un ferry entre ambos puntos. Por estar conectados tanto por agua como por tierra, durante milenios el intercambio gastronómico entre ambas culturas ha sido común, abundante y fértil.
Selección de platillos, Palikari
Algo con lo que tienes que empezar sí o sí es el tzatziki: un dip de yogurt, pepino, algunas hierbas frescas y aceite de oliva. Te recomendamos probar el de Palikari, la pintoresca fondita griega ubicada en la Colonia del Valle. O si quieres entrar de lleno a este menú, atrévete con una taramosalata, a base de caviar de carpa, el famosísimo aceite de oliva extra virgen griego y un poco de limón.
Uno de los platillos más clásicos de esta cocina es sin duda la moussaka, una deliciosa construcción de capas de berenjena y otras tantas de carne bañada en una salsa de harina o leche. Puedes buscarla en Estiatorio Mythos, donde ha causado verdadero furor entre quienes la prueban, o también en Agapi Mu, famoso por su sabor tradicional y auténtico. También imperdible es la spanakopitakia, una empanada de pasta filo rellena de queso feta, espinaca y hierbas.
Spanakopitakia, Ouzeria
Lo más conocido de la comida griega es probablemente el gyro, y con justa razón: este amplio “taco” de pan pita y relleno de verduras, carne, tomate y tzatziki puede satisfacer hasta a los más exigentes por su tamaño y gran sabor. En Ouzeria hay hasta una ventanilla donde puedes hacer tu orden express de gyro y postre para llevar.
Y para beber también tienes excelentes opciones. Brinda con por lo menos una copa de ouzo, un licor griego anisado que puede beberse solo o en coctel.
Nido de cordero en pasta filo, Estiatorio Mytho
Pero comida que se respete debe terminar con un buen postre. Es imprescindible disfrutar el culto griego a la pasta filo: si los tres pilares de la cocina en Grecia son el pan, el aceite de oliva y el vino, el cuarto pilar honorario es esta pasta. Tiene presencia tanto en lo dulce como en lo salado: sean envueltos, empanadas u hojaldres, bañada en miel o rellena de queso feta, la pasta filo tiene una presencia casi mágica. Agasájate con un tradicional baklava o con un delicioso galaktoboureko: natilla de vainilla envuelta en esta magnífica pasta. Lo mejor es probarla en Estiatorio Mythos o en su restaurante hermano Ouzeria – ¡te aseguramos que es más sencillo disfrutarlo que pronunciarlo!
Baklava, Estiatorio Mythos
Como toda gastronomía, la griega tiene opciones desde lo más casero hasta platillos dignos de Hera. Aunque no existen demasiadas opciones en nuestra ciudad, las que tenemos ofrecen una amplia variedad de platillos y sabores nuevos.
Alfonso Reyes 96, Hipódromo Condesa, CDMX
Av. Isaac Newton 7, Polanco, CDMX
Julio Verne 95 esq. Alejandro Dumas, Polanco, CDMX
Santa Barbara 325, Colonia del Valle, CDMX