¿Alguna vez has probado el vino y te ha dejado esa sensación seca y áspera en tu boca? ¡Son taninos en acción! Estos compuestos naturales se encuentran en la piel, las semillas y los tallos de las uvas, siendo los responsables de darle al vino esa estructura y textura que tanto disfrutamos.
¿Qué son exactamente los taninos?
Los taninos son compuestos orgánicos que se encuentran comúnmente en diversas plantas, especialmente en la corteza, las hojas, las semillas y las frutas de muchas especies de árboles y arbustos.
Son conocidos por su capacidad para interactuar con proteínas, almidones y otras macromoléculas, lo que les confiere propiedades astringentes y amargas. De igual manera los podemos encontrar en bebidas como el té, la cerveza y el café, así como en alimentos como las nueces, las bayas y ciertos tipos de chocolate.
Pensemos en ellos como el esqueleto del vino. Aportan cuerpo y firmeza, equilibran los sabores y crean así una experiencia sensorial única. ¿Has oído hablar de ese vino “bien estructurado”? Los taninos son los responsables de que se le llame así.
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Diversidad de taninos y otros de sus usos
No todos los taninos son iguales. Algunos son suaves y sedosos, mientras que otros pueden ser más ásperos y agresivos. Haciendo de cada botella de vino diferente y con una personalidad propia.
En la industria alimentaria y enológica, los taninos son particularmente relevantes en la elaboración del vino, ya que contribuyen a la estructura, el sabor y la capacidad de envejecimiento.
Además de su papel en la industria alimentaria, los taninos también tienen aplicaciones en la medicina tradicional y en la actual, atribuyendo una variedad de propiedades, como las antioxidantes y antiinflamatorias, aunque su uso medicinal varía según la cultura y la tradición.
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Los taninos en el vino son esenciales para su estructura y sabor. Desde su aportación a la textura hasta su influencia en la diversidad de sabores, estos compuestos naturales merecen ser apreciados. Entender su papel mejora nuestra experiencia al degustar vino, elevando cada sorbo a una experiencia única. ¡Salud y disfrutemos de un buen vino!