¿Cómo identificar un mal coctel? Conoce seis puntos clave para reconocer si un drink, cerveza, o hasta vino no es como debería ser.
El mundo de la mixología ha crecido de tal forma que a veces es fácil desorientarnos o perder la pista. Conoce los mejores tips para identificar un mal coctel y evaluar la calidad de cualquier bebida.
Por Michelle López. Imágenes: Shutterstock
Cocteles como el gimlet o el Cosmo deben siempre estar lo más fríos posible, rondando los -5C. Si la temperatura no es la ideal, probablemente el shakeo fue muy corto o muy débil. Lo recomendable es shakear durante aproximadamente 15 segundos.
Martinis y cosmos no deben llegar a una temperatura demasiado baja, sino al punto preciso justo antes de helarse. Esto mantiene las propiedades de aroma y nivel alcohólico de la mezcla. Si el coctel está demasiado frío se perderá toda la expresividad, matando aroma, sabor, y experiencia. Puede agitarse desde 30 segundos hasta minuto y medio, y hay quienes recomiendan ir probando el coctel durante el proceso para evaluar la temperatura y evitar que se diluya demasiado.
Una de las características más distintivas de la cerveza es su corona de espuma. Las cervezas belgas o alemanas deberían tener entre cuatro y seis centímetros de espuma; otras variedades al menos uno. La espuma sirve para presentarnos la cerveza en su dimensión aromática y preparar nuestro paladar para el primer sorbo, además de que su presencia permite liberar carbono para que la bebida sea más gentil con el estómago.
–Tips para preparar los mejores cocteles
Cuando detectamos un sabor rancio o viejo en la copa, muy probablemente se trata de vino que no fue bien sellado o cuyo corcho se contaminó y por lo tanto contaminó a su vez el líquido. Los bares y restaurantes tienen una capacitación especial para detectar este fenómeno, pero siempre hay un margen de que una copa alterada llegue al comensal.
Un Appletini es verde vibrante, el rosa intenso del Cosmopolitan es inconfundible. Si ponen frente a ti una copa con tonos débiles o simplemente otro color (por ejemplo, un Appletini azul), puedes estar seguro de que algo no anda bien, sea con la proporción de ingredientes, la cantidad de hielo o mezclador, o incluso con la orden general.
Cada mezcla tiene un vaso específico que le ayuda a mantener sus propiedades de aroma y temperatura, es por eso que cocteles como el martini tienen copas tan icónicas. Cualquier coctel que lleve el nombre “highball” o esté relacionado con ese término deberá ir en un vaso alto, mientras que el coctel Tom Collins tiene su propio vaso, el Collins, para mantener la efervescencia. Un Sazerac siempre irá en un “tumbler” o vaso corto. Servir un drink en la cristalería incorrecta pone en riesgo sus propiedades.
Ahora que ya sabes qué signos de alerta buscar, ¡prepárate para una temporada rodeado de los mejores cocteles!