Beber siempre es un placer, y beber un buen vino no tiene comparación, como es el caso de Bodegas Arzuaga. El hedonismo, del griego hedone = placer, es la doctrina donde el bien es el placer y el mal es el dolor. El placer es la felicidad humana, y, consecuentemente, el vino es la felicidad.
Por Alexis Beard.
Bodegas Arzuaga, un vino con tradición
Bodegas Arzuaga está ubicada en Valladolid, en plena Denominación de Origen Ribera del Duero. El escenario donde nacen los vinos que elabora la bodega lo encontramos en la finca La Planta. Es una propiedad que la familia Arzuaga posee en la localidad vallisoletana de Quintanilla de Onésimo. Esta finca cuenta con una situación privilegiada para el cultivo de la vid, ya que sus cepas reciben el sol y la humedad necesaria para la perfecta maduración de la uva.
La oferta turística planteada desde Bodegas Arzuaga pretende involucrarnos en todos los aspectos y sensaciones que impregnan sus terrenos en la Ribera del Duero. No todo se basa en la degustación y disfrute del vino. También es muy enriquecedor ver dónde cultivan las uvas con las que este se elabora y por qué adquiere los matices que tanto amamos.
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En esta región castellana, con suelos de escasa fertilidad, se cultivan las variedades Tinto Fino o Tempranillo. Así como las francesas Cabernet Sauvignon y Merlot. El 80% de las viñas superan los 20 años bajo producción más o menos de 4.000 kg/ha. Por otro lado, Bodegas Arzuaga posee viñedos fuera de la provincia de Valladolid. Concretamente en la localidad de Malagón, en Ciudad Real, donde elabora el vino Pago Florentino.
En un mismo espacio de 1.500 hectáreas, la finca Arzuaga posee, además de 150 hectáreas de viñedos de distintas variedades que podremos identificar, una reserva de caza mayor donde conviven jabalíes, ciervos y muflones. Aquí, conviven una flora compuesta de pinos, encinas y sabinas y una fauna formada por jabalíes y ciervos. Esta convivencia es, sin duda, la constatación del amor que siente la familia Arzuaga por el mundo de la naturaleza.
Un hotel en medio de la naturaleza
El Hotel Arzuaga es ideal para todas aquellas personas que quieran disfrutar de la naturaleza. También de la viсa y de los beneficios de la vinoterapia y los tratamientos termales. Un bello y encantador hotel boutique, rodeado por la belleza de los viñedos y las montañas de Ribera del Duero, es el escenario perfecto para unos días de hedonismo.
Aqui, el vino y la alta cocina se fusionan en un baile seductor en el restaurante gourmet Taller Arzuaga. Galardonado con una estrella Michelin, este bello restaurante presenta cocina castellana de vanguardia. Está basada en los productos de la tierra y especialmente de la caza de la finca La Planta, cuna de los vinos Arzuaga.
En su menú, disfrutamos de diversas creaciones culinarias, cada una con una presentación única y creativa. El primer tiempo lo tomamos en la cava, sobrevolando la sala de embotellamiento. El siguiente platillo lo disfrutamos en la barra del chef, con vista a la cocina, donde podemos observar el maravilloso trabajo de los cocineros. Este segundo tiempo cuenta de cinco originales aperitivos: Truchón, anguila, perdiz, corzo, macaron.
Disfrutamos también del plato llamado “Nuestro huerto ecológico”, el cual cambia con cada temporada y presenta los mejores productos del jardín botánico Arzuaga. Nos deleitamos con un sinfín de manjares espectaculares, desde una seductora creación de ciervo, coco y tuétano, hasta la extremadamente original presentación de tres pescados con aire de limón y tres salsas, para maridar a nuestro gusto.