El dulce de leche es un ingrediente esencial en la repostería de ciertos países de Latinoamérica. Su textura cremosa y sabor acaramelado lo convierten en un manjar irresistible sin importar la edad. Aunque puedes comprarlo en el supermercado, prepararlo en casa te permite tener tu propia dotación disponible en cualquier momento. Aquí te contamos sobre cómo puedes preparar dulce de leche casero sin fallas.
Por: Desiree Perea
¿Cuáles son los ingredientes del dulce de leche tradicional?
Los componentes del dulce de leche son realmente sencillos. Si puede considerarse como una receta difícil, lo que requiere más atención es la parte de la incorporación de los mismos. La anatomía a grandes rasgos de este antojo dulce es: leche de vaca, azúcar y esencia de vainilla. Algunas personas pueden darle un toque personal con algún tipo de licor o bien, frutos secos como nueces o almendras.
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Desde el principio, esta receta requiere de calor para lograr el sabor y textura adecuados. Todos los ingredientes se añaden al mismo tiempo. Deben mezclarse por un periodo de tiempo largo. Suele añadirse un poco de bicarbonato para lograr una consistencia suave. El azúcar al caramelizarse, ayuda a espesar la mezcla. De esta manera, el resultado final presenta un producto untable.
El bicarbonato de sodio también tiene efecto para ayudar al equilibrio de sabores. Por otro lado, dominar las temperaturas al preparar el dulce de leche, logra obtener una mezcla tersa y limpia. El azúcar no debe cristalizarse. Pues no buscamos elementos sólidos en la preparación. La paciencia es sin duda un elemento primordial en esta preparación.
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Aspectos a considerar para evitar errores
En primer lugar, esta especie de salsa dulce requiere de atención durante todo el proceso de preparación. Al incluir leche y azúcar, ambos elementos necesitan de movimiento contantes cuando la receta incluye calor. Una olla gruesa es tu mejor aliado, para así ayudar que el fuego no esté en contacto directo. Asimismo, debes considerar un nivel de fuego medio durante todo momento. Así evitarás que se queme.
Para no rayar el fondo de la olla, lo mejor es ayudarte de una cuchara o pala de madera. Los utensilios de este material con mucho más amables en recetas que requieren de movimiento constantes. Debe batirse hasta lograr que ya no se perciban los granos de azúcar. De igual manera, el cambio de color en la mezcla es totalmente normal.
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Finalmente, ¿cómo saber que el dulce de leche está listo? Si bien es posible comprobarlo a simple vista, pues toma un color café ligeramente oscuro. Otra opción también es tomando en cuenta la consistencia. Con ayuda de una cuchara pequeña, coloca una gota en un plato de vidrio. Si ésta mantiene su forma, entonces está listo. Recuerda que para un mejor almacenamiento debe dejarse enfriar.
Posteriormente se coloca en un recipiente de vidrio con cierre hermético y se debe mantener el refrigeración. Así tendrás lista tu propia dotación de dulce de leche en casa. Para acompañar con pan tostado. O bien, como opción de relleno en galletas o panqués. Incluso, puedes añadirlo como endulzante a tu café, para darle un toque diferente.
