A principios del siglo XVII, las aspiraciones de Diego Velázquez por pertenecer a la realeza y mostrar su pureza de sangre, le hicieron dejar su natal Sevilla para probar suerte en Madrid, cuna del imperio hispano. Al llegar a la capital española, este artista tuvo la suerte de recibir el mecenazgo del rey Felipe IV.
Texto por: Eduardo Carrasco
Adquirir el favor real obligaba a este pintor a realizar retratos de la monarquía y sus integrantes. El año clave de la carrera de Velázquez fue 1656, en donde por encargo del rey, el artista realizó un cuadro que pasaría a la historia del arte por el simbolismo que esconde en cada trazo.
Texto por Eduardo Carrasco.
Los personajes
Las meninas de Velázquez es una obra que originalmente se tituló La familia de Felipe IV. En 1724, el especialista Antonio Palomino reveló quienes eran los personajes reales que aparecían en el cuadro. En primer lugar aparece la infanta Margarita, quien ocupa el centro de la pintura. Alrededor de ella están las meninas, María Agustina Sarmiento e Isabel Velasco, damas de compañía de la pequeña princesa.
De lado izquierdo aparece el propio pintor Diego Velázquez, quien tuvo la audacia creativa para colocarse a sí mismo dentro del cuadro. Los críticos han señalado que con ese hecho el pintor sevillano quería elevar el estatus de los retratistas, los cuales no eran tan reconocidos por las obras que hacían.
De forma casi oculta aparecen, en el espejo, el rey Felipe IV con su esposa Mariana de Austria. En el umbral de la puerta está José Nieto, el aposentador de la reina. A un costado de él, se encuentran Marcela Ulloa y el guardadamas. La escena la complementan los bufones María Bárbola, Nicolasito Pertusato y un perro que yace recostado en el piso.
Para el historiador del arte Jonathan Brown, esta obra representa un reto para la crítica porque es una fuente inagotable de interpretaciones que no deja de decirle nuevas cosas al público que la observa. El misterio que guarda esta pintura tiene que ver con las diversas perspectivas y los detalles que tiene. Cada personaje es un enigma que invita a ser revelado.
Desde su apertura hasta el día de hoy, Las meninas de Velázquez se encuentran en el Museo del Prado en Madrid, España.
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