Disfrutar de esta bebida es también disfrutar del fascinante legado culinario de Jalisco. Este estado es reconocido por un destilado de reconocimiento mundial: el tequila. La batanga es una trago que precisamente tiene a este licor como uno de sus elementos protagonistas. Aunque para muchos podría parecer como una combinación extraña, la realidad es que al probarla, hace todo el sentido del mundo. En esta nota, te contamos sobre la historia detrás de la misteriosa batanga.
Por: Desiree Perea
La batanga es nuestra versión mejorada de la cuba
A simple vista, esta bebida fácilmente se confunde con la cuba; sin embargo, las diferencias son puntuales y se comprueban al momento de degustarse. La batanga también tiene como co-protagonista al refresco de cola, así como las ligeras notas ácidas del limón. Pero donde es clave hacer la distinción es en el elemento alcohólico; mientras la cuba deja brillar al ron blanco, en la batanga el destilado estrella es el tequila blanco.
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La batanga no tiene mayor ciencia detrás de su preparación, pero es importante poner atención a los detalles para comprobar que estés degustando la versión original. Antes de servir el refresco y el tequila, el vaso debe escarcharse con limón y sal blanca. Posteriormente, se coloca hielo, y se agrega primero el tequila con el jugo de limón. Al último va el refresco para evitar que las burbujas desaparezcan rápidamente.
Un coctel que hoy parte de la historia de Tequila, Jalisco
La batanga es uno de esos cocteles icónicos que hoy no pasa desapercibido. Su origen se encuentra en ‘La Capilla’, nada más y nada menos que la primer cantina de Tequila, Jalisco. Aquí, el dueño (quien también estaba al frente de la barra) fue quien se encargó de presentar esta bebida.
Claramente el tequila era el destilado estrella del lugar, así que para lograr que más personas probaran este destilado, decidió mezclarlo con refresco de cola. El sabor de la batanga es intenso, con notas dulces, saladas y ácidas que se equilibran a la perfección. Sin embargo, el toque especial llegaba al momento de mezclar todos los elementos.
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Todo se mezclaba con ayuda del cuchillo que se utilizaba para cortar tanto el limón como otros ingredientes para las botanas. Así, el trago lograba un sabor donde a veces podían aparecer sabores como chile fresco, cebolla, cilantro, etc.
Una vez que los primeros clientes probaron la batanga, no hubo vuelta atrás. Hoy, es uno de los cócteles estrella al visitar este Pueblo Mágico. Compararlo con la cuba no tiene sentido, pues ambas bebidas son completamente diferentes y merecen una oportunidad. Para esta temporada de calor, la batanga no deja de ser favorita para disfrutar de una tarde al aire libre.
