Ubicado en el icónico Valle de Guadalupe, conocido por su inigualable clima y suelos perfectos para el cultivo de la vid, Hilo Negro se ha consolidado como uno de los viñedos más destacados de la región. Desde su fundación, más de una década atrás, ha demostrado ser un destino indispensable para quienes buscan disfrutar de vinos de alta calidad y de una experiencia enológica completa.
La esencia de Hilo Negro: tradición y modernidad en cada botella
El viñedo Hilo Negro, dirigido por el reconocido enólogo Daniel Lonnberg, destaca por su compromiso con la innovación y el respeto a las tradiciones vinícolas. Con más de 25 años de experiencia en la elaboración de vinos, Lonnberg ha sido fundamental en la creación de etiquetas que reflejan la esencia del Valle de Guadalupe. Desde vinos blancos frescos hasta tintos complejos, cada uno de sus productos se elabora con gran atención al detalle, capturando la autenticidad de la región.
Reconocimientos internacionales y presencia en eventos destacados
La calidad de Hilo Negro ha sido reconocida a nivel global, recibiendo importantes galardones en concursos de renombre. Como el Concurso Mundial de Bruselas y el Concurso Internacional de Vinos Bacchus. Además, su presencia en eventos vinícolas como Nación de Vinos y la Feria Nacional del Queso y el Vino subraya su relevancia en la escena vinícola internacional. La bodega ha logrado posicionarse como un referente tanto en México como en otros países gracias a su enfoque en la excelencia y la innovación.
Algaravino: un espacio para degustar la pasión por el vino
Una visita a Hilo Negro no estaría completa sin explorar su sala de degustación, Algaravino. Aquí, los visitantes tienen la oportunidad de probar una amplia variedad de vinos. Cada uno con un carácter único que refleja el trabajo meticuloso detrás de cada etiqueta. La experiencia de cata, guiada por expertos, permite tanto a aficionados como a conocedores sumergirse en el arte de la vinificación y apreciar la complejidad y profundidad de los vinos que ofrece Hilo Negro.
Gastronomía a la altura de los vinos: los restaurantes Emat y Radix
Además de su destacada oferta vinícola, Hilo Negro cuenta con dos aclamados restaurantes: Emat y Radix, ambos bajo la dirección del chef Eduardo Salgado. La propuesta gastronómica de Salgado complementa a la perfección la variedad de vinos del viñedo. Creando una sinergia entre los sabores de sus platillos y las cualidades de cada etiqueta. Los visitantes pueden disfrutar de una experiencia culinaria inolvidable, donde cada plato realza los matices y texturas de los vinos.
Radix, la innovación culinaria en el corazón del Valle de Guadalupe
Un destino ideal para eventos y experiencias inolvidables
Más allá de su producción de vinos, Hilo Negro se ha convertido en un lugar perfecto para la celebración de eventos especiales. Sus instalaciones, ubicadas en el corazón del Valle de Guadalupe, ofrecen un ambiente elegante y acogedor para bodas, reuniones corporativas y catas privadas. Además, la belleza natural del entorno añade un toque único a cualquier celebración, convirtiendo cada momento en una experiencia memorable.
Una visita que trasciende lo ordinario
Hilo Negro no es solo un viñedo, es un destino que ofrece una experiencia sensorial completa. Desde recorrer los viñedos hasta participar en talleres de maridaje, cada actividad está diseñada para que los visitantes puedan disfrutar al máximo de la magia del vino. Para quienes buscan una experiencia auténtica y sofisticada, Hilo Negro es la opción ideal.
Si deseas conocer más sobre la excelencia vinícola del Valle de Guadalupe, Hilo Negro es una parada obligatoria. Con su enfoque en la calidad y su pasión por el vino, este viñedo sigue siendo un referente en la industria, brindando a los visitantes una experiencia única en cada sorbo.