Llena tu latte de creatividad con estos tips para lograr arte latte en casa. Sin una máquina parecerás todo un barista profesional.
¿Quién dice que tomar café no puede ser divertido? Sal de la rutina cualquier día y logra hermosas creaciones. No necesitas ser un gran barista o contar con equipo profesional. Lo único que debes tener para hacer arte latte es un poco de creatividad y ganas de seguir y seguir intentándolo, ¿estás listo?
Por Yulissa Arcos
Para comenzar debes saber que el arte latte es la técnica que plasma dibujos sobre la espuma del café latte. Métodos más profesionales elaboran diseños en 3D y a color. ¡Puedes tener a tu personaje favorito en tu bebida! Para lograrlo en casa te dejamos estos tips, que seguramente te volverán todo un máster.
Aunque para este procedimiento no necesitas una máquina especializada, te recomendamos usar una cafetera moka, o bien, una olla convencional. Ahora sí: prepara tu espresso. En caso de que hayas optado por hacerlo de forma casera, recuerda que debe ser café negro concentrado.
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Mientras el espresso está listo, es hora de trabajar la leche. Llévala al fuego, pero ¡ten cuidado! Es importante que no hierva pues cambia el sabor. Ya caliente deberás batir. Te recomendamos hacerlo en prensa francesa, pero si no la tienes puedes hacerlo con batidor eléctrico o de globo. Sabrás que está lista cuando el lácteo doble su cantidad inicial.
Para ensamblar la bebida, es importante que ocupes una taza con espacio considerable para crear tus diseños. Sirve un cuarto de taza del espresso y coloca la leche, ya batida, en una jarra pequeña. Esto te dará mayor control de tus movimientos y será más fácil manipularla.
El secreto está en el movimiento de la muñeca. Sostén la taza del asa inclinándola unos 45 grados. Vierte la leche dejando alrededor de 10 centímetros de distancia, lo que permitirá que el lácteo y el café se mezclen por completo. Intenta verter la leche por el centro, evitando manchas blancas.
Cuando hayas servido la mitad o tres cuartos detente un momento. Es tiempo de hacer el diseño. La manera correcta de hacerlo es acercando la jarra inclinada a la taza. Para iniciar con el latte art, vuelve a verter en el centro de la superficie, al mismo tiempo, y poco a poco, coloca la taza en posición recta.
Los tres dibujos más comunes de arte latte son: tulipán, corazón y roseta. Posiblemente el más sencillo sea el corazón, para lograrlo (y siguiendo el procedimiento anterior) sirve la leche en el centro de la taza en la misma posición. Verás que una mancha blanca se hace cada vez más grande.
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Luego de que tenga el tamaño deseado, y manteniendo la posición de la jarra, atraviesa la figura hasta la parte inferior. Lograrás hacer la punta del corazón. Si estás listo para hacer algo un poco más complicado, intenta el tulipán.
Sirve la leche, esta vez no será en el centro, sino más adelante; casi en el filo frontal de la taza. Vierte y frena una y otra vez hasta llegar hasta la parte trasera. Intenta que cada mancha de leche tenga espacio entre sí. Las dos últimas figuras deberán hacerse con la técnica del corazón, aunque a escala pequeña.
Sin detener el hilo de leche, cruza las figuras del filo trasero hasta el frontal, ¡listo! Cuando domines estos diseños estarás preparado para lograr la roseta. Primero vierte la leche iniciando por el filo frontal de la taza. El movimiento de tu muñeca que sostiene la jarra deberá ser rápido e ir en zigzag hacía atrás.
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Entre más rápido seas las ondas de tu dibujo tendrán más espacio entre ellas. Cuando hayas llegado hasta la parte trasera, con la taza en posición recta y sin dejar de servir, regresa a la parte de enfrente. Una línea atravesará las formas y tendrás listo un latte con una roseta encima.