Tacos, tostadas y aguachiles con pesca de Baja California, con un toque mexicano y asiático que los hace especiales y perfectos para la primavera
La colonia Narvarte de la CDMX tiene una nueva sede de mariscos frescos: Contracorriente, el restaurante a cargo de los chefs Alin Castillo y Cristian Caballo, donde la pesca de la Baja va perfecto con una cerveza helada.
Por Ollin Velasco
El lugar es pequeño y absolutamente suficiente. Las mesas dentro del local y sobre la calle logran su cometido: hacer que te sientas relajado, comiendo al aire libre productos traídos en su mayoría de Baja California, con una bebida fría en mano para contrarrestar el calor de la primavera en la CDMX.
Contracorriente ofrece opciones siempre ganadoras en una marisquería, con un toque mexicano y hasta asiático que las hacen especiales. Su nombre no es casual: hace referencia a una propuesta que explora siempre nuevas posibilidades. Por ahora sólo venden aguas, cerveza y mezcal para acompañar los alimentos (y pronto es probable que diversifiquen su carta de bebidas), pero créenos: no se necesita más.
Sus entradas son una muestra de lo que te espera si llegas con hambre hasta sus mesas. De entrada, siempre llega un caldito de camarón de cortesía, con limones. Para empezar también hay un sashimi de callo garra de león, camote balls de sierra ahumada, pescadillas al comal, tiritas de pescado rebozado y tlacoyos de requesón o frijol con camarones a la diabla.
Puedes seguir con una sopa azteca con camarones y chicharrón norteño o sus clásicos tacos de chicharrón de pulpo con costra de queso Provolone, el de pescado rebozado con pico de gallo de piña al mezcal o el de chicharrón norteño. Sus ingredientes son buenos y eso se nota de inmediato.
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Si vas con más antojo de una tostada, recomendamos la de camarón, la de atún con guacamole o la de pescado con leche de tigre. Igual hay ceviche de atún con sandía y jícama, de pescado con coco, cúrcuma y zatar y, claro, la de garbanzo. Casi todos aman la cocina de mar, pero en caso de que no sea tu fuerte es bueno que sepas que hay opciones para variar la oferta.
Si vas, échale ojo a sus aguachiles y a sus gorditas de chicharrón de pulpo, de sierra ahumada y de chicharrón prensado. Procura llegar al postre: el chef Castillo hace tiramisús y carlotas de diferentes frutas que no puedes dejar intactas. Además, los recipientes en que los manda son de vidrio y totalmente reciclables.
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Luego de meses en confinamiento a causa de la pandemia, una salida a Contracorriente se agradece. El sitio es pet friendly en la parte de afuera y, a pesar de estar al borde de la calle, se siente tranquilo.
La cuenta no va a espantarte. Los precios, tomando en cuenta que usan insumos traídos desde el otro extremo del país, son accesibles para distintos presupuestos.
“Nuestra idea es acercar comida buena, y de buen origen, a todo mundo. Las porciones que servimos son generosas y nos encargamos de que lleguen impecables a la mesa, aún siendo muy desenfadadas. Queremos que nuestros clientes valoren la cocina de mar bien hecha”, asegura el chef Alin Castillo.
El taco de chicharrón de pulpo.
Disfruta de una comida al aire libre en cualquiera de las mesas de afuera y pide probar la sriracha casera que tiene como base yogurt. Es una gozada.
Hacen un aceite de chile habanero que pica delicioso. Éntrale sólo si eres bueno para los chiles.
Dónde: Ixcateopan 72, Vértiz Narvarte, Benito Juárez, CDMX.
Cheque promedio: $250 por persona.