Brasil es un país de gran diversidad cultural y paisajes deslumbrantes que también presume una gran riqueza culinaria. Dentro de esta vasta cocina, los postres brasileños destacan por su originalidad, sabores y colores. En esta nota, te presentamos algunas de sus delicias dulces enriquecen a su legado culinario. Cada uno de estos postres tiene una historia y sabor únicos que representan la esencia de Brasil.
Por: Desiree Perea
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Hablar de gastronomía brasileña nos remonta la mayoría de las veces a cortes de carne a las brasas. Claro que son expertos y el explorar otros platillos no le resta mérito; sin embargo, también vale la pena echar un ojo sus postres. Así como México presume un amplio catálogo, la cocina dulce en Brasil tiene las herramientas para consentir a todos los paladares. Tanto con recetas propias, como cocina fusión que se adoptó para gustos nacionales.
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La suma de influencias europeas y africanas y la cultura indígena contribuyó con sabores y técnicas propias; especialmente en el uso de frutas tropicales como el açaí, el mango y el guaraná. También destaca en el empleo de técnicas de cocción tradicionales, a través de ellas, los postres brasileños no serían lo mismo. El conjunto de todos estos elementos, dieron lugar a una repostería colorida y diversa.
La cocina dulce de Brasil es mucho más que una serie de postres; es una forma de presentar la riqueza cultural del país. Cada bocado de brigadeiro o quindim cuenta una historia de mestizaje, de historia y de celebración. A continuación, te presentamos algunos de los postres de Brasil más icónicos. La lista sin duda es amplia, pero si empiezas a interesarte por esta cocina sudamericana, son buenos ejemplos para comenzar.