5 postres clásicos que no pueden faltar en la cena de Thanksgiving

1. Pecan pie

Además del pay de calabaza, podríamos decir que el pecan pie es el postre predilecto en la cena de Acción de Gracias. Existe una gran ciencia detrás de esta tarta pues el relleno es denso con una caramelización perfecta. Como su nombre lo dice, las nueces pecanas son las estrella de la receta; se mezclan con un jarabe aromático que permite servir un relleno ligeramente firme. Se sirve a temperatura ambiente y se puede acompañar con un poco de crema batida o helado de vainilla.

2. Tarta de manzana

Este es otro postre clásico que Estados Unidos presume con orgullo. La mezcla de manzanas caramelizadas con canela es un sabor que se incluye en un sinfín de postres; pero si buscas una opción para servir al centro, una tarta horneada es ideal. Parte de la magia de este postre es su profundidad tanto en sabor como en aroma; además, aprovechar una masa hojaldrada es perfecta para jugar con las texturas. En la parte superior, puedes dejar que las manazas se caramelicen o bien, cubrir con una reja de masa para mantener una tarta firme.

3. Pay de calabaza

La cena de Thanksgiving tradicional reserva un lugar especial para este postre histórico. La calabaza de Castilla es una especie que está disponible únicamente durante el otoño, y esta tarta horneada es la mejor forma de aprovecharla. La base ideal es la masa quebrada, pues resiste un buen nivel de humedad, además de que el cambio de texturas hace que sea un poste amable al paladar. En el interior, se coloca un relleno terso de calabaza con especias dulces; al hornearse, el puré se solidifica y permite que los sabores se fusionen.

4. Pastel de zanahoria

Los pasteles son uno de esos postres nunca fallan; la categoría es realmente amplia por lo que es posible darle gusto a la mayoría de los invitados. Durante el otoño, el pastel de zanahoria es perfecto pues es realmente aromático. La mezcla tiene como característica una densidad mayor; en ella se incluye zanahoria rallada, canela, nuez moscada, pasas y nueces pecanas. Al ser un bizcocho pesado, el tiempo de horneado es clave para asegurar una cocción perfecta. Una vez listo, el betún de queso crema aporta gran humedad y permite equilibrar el dulzor.

5. Peach cobbler

Por último, si estás en busca de un postre completamente fuera de lo común, esta opción es perfecta. La receta más popular se prepara con duraznos frescos y es un postre clásico del verano, pues es la mejor temporada de dicha fruta. Sin embargo, durante el otoño y el invierno, la fruta se puede cambiar fácilmente. Se puede optar por cerezas, arándanos, manzana o pera como ingrediente protagonista. Se coloca una porción abundante de compota de cerezas y sobre este relleno, se colocan bisquets deshechos, así como un poco de galletas de vainilla trituradas. Es un postre horneado que se sirve caliente, comúnmente se decora con un poco de crema batida o helado de vainilla.