No tenemos nada contra el queso. Todo lo contrario. Pero queríamos compartir contigo lo fácil que es preparar una pasta cremosa, sin necesidad de usar un solo gramo de queso ni crema para ello.
La gloria de una pasta cremosa
Sabemos que las amas. Nosotros también. Las pastas cremosas son tan reconfortantes, que caen siempre bien, no importando la hora del día que sea. No hay nada como sacar cucharadas de la comida calientita, directamente del recipiente donde se hizo.
Cuando se trata de una pasta cremosa, las posibilidades son infinitas. Las puedes hacer con la forma de la pasta que quieras, así como con la base, proteínas y toppings que desees.
Pero, ¿sabes cómo lograr una súper cremosa sin usar precisamente ingredientes cremosos? Acá te decimos cómo.
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El roux, la gran opción
El secreto para lograr esta receta está en una preparación francesa llamada roux. Ésta consiste en derretir mantequilla, donde posteriormente se dora harina blanca de trigo. Sobre esta pasta base solo debe agregarse agua o leche, para empezar a preparar una salsa.
Por raro que te resulte, el almidón de la harina es la que le va dando cuerpo a la preparación. Entre más revuelvas y se caliente, más espesa se hará. Eso sí, debes cerciorarte de que todos los grumos de la pasta de mantequilla y harina se deshagan, o la salsa de la pasta no te quedará uniforme.
Una vez que tengas la salsa blanca base, podrías incluso solo especiarla y percatarte de que su nivel de sal es bueno, para servirla con tu pasta de preferencia, previamente cocida y al dente.
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Otra opción que nos gusta mucho es la de dorar junto con la pasta inicial un poco de cebolla, jamón de buena calidad o hasta vegetales cortados finamente. De esta manera, tu pasta cremosa tendrá más texturas.
Una vez que mezcles la pasta con la base blanca caliente, revuelve un poco la preparación, ya fuera del fuego, y sirve lo más pronto que se pueda. Si llegado a este punto se te antoja un poco de crema o queso, puedes agregarlos para lograr aún más cremosidad.
A todo esto solo bastará agregar un poco de vino a temperatura correcta, para tener un banquete en la mesa. ¿Te animas a hacer una pasta cremosa sin queso ni crema?