Maroma: la galería mexicana en tiempos efímeros

En el arte, como en otros ámbitos, corren buenos tiempos para lo efímero. Exhibiciones, galerías e instalaciones itinerantes aparecen y desaparecen en Nueva York, Barcelona y tantas otros territorios fértiles para el arte contemporáneo. Por supuesto, Ciudad de México no es la excepción. Destaca la propuesta de Maroma, la “galería en movimiento” de Samantha Calderón y Alejandro Pérez De Alba que recientemente presentó su quinta edición en la colonia Roma. El evento fue titulado “Templo” y estuvo a cargo de la artista mexicana Fernanda Caballero.

Maroma presenta a Fernanda Caballero

Instalada en una antigua casa sobre Medellín 65, Maroma dio lugar a un escenario desnudo, en concreto y ladrillos expuestos. Ahí, la artista mexicana Fernanda Caballero pintó en tiempo real una serie de intervenciones in situ sobre lienzos de tela. Acaso un momento clave para comprender en dónde radica el éxito de las obras y galerías efímeras. Y es que, como nunca, en este tipo de eventos los espectadores tienen oportunidad de sentirse partícipes del culminante momento creativo. En pocas palabras, se asistió al nacimiento de la obra. Como parte de la experiencia, la edición fue acompañada por la música de Joaquina Mertz, intérprete mexicana de R&B con presencia en México y Estados unidos.

Si bien uno de los pilares del arte contemporáneo está basado en acciones estéticas en vivo y en tiempo real, o instalaciones que conviven con el espacio público, propuestas como la de Maroma ofrecen a los asistentes la posibilidad de adquirir la obra. En  el contexto mexicano, donde se encuentran emergiendo nuevas generaciones de coleccionistas, esta propuesta parece ser un buen aliciente para la compra-venta de arte.

Sobre la galería

Más allá de su estatus de galería, se trata de una plataforma que busca el desarrollo y la promoción del arte y la cultura. A través del concepto de “arte en movimiento”, proponen “descubrir o reactivar espacios de Ciudad de México”. Desde su primera edición se ha caracterizado por recrear sitios como bodegas, edificios antiguos o construcciones abandonadas en la capital de arte mexicana.

A diferencia de las galerías convencionales, su naturaleza cambiante pretende acercarse a los intereses y posibilidades de el público general. En pasadas ediciones, el proyecto de Samantha Calderón y Alejandro Pérez De Alba ha desarrollado proyectos con artistas como Ana Drucker, Lorea y Alejandro Olávarri, Alicja Biala y Jesús Trinidad.

Sobre la artista

La artista egresada del CEDIM (Centro de Estudios de Diseño de Monterrey) ha centrado su trabajo en el uso de técnicas prehispánicas de teñido y trenzado, tejidos en marco y pintura con pigmentos naturales, además del uso de textiles reciclados. De acuerdo con el comunicado de Maroma, el lenguaje plástico de Caballero está influenciado por “disciplinas como el yoga, la danza y la medicación, que fueron determinantes para el tema de esta exposición”.