Adéntrate en la cocina con un ingrediente multifacético. Te dejamos un par de sugerencias para preparar carne molida en diversas presentaciones.
Dentro de los platillos con carne, existen grandes posibilidades con las que pueden prácticas tus habilidades culinarias. Desde las clásicas hamburguesas, hasta recetas horneadas. Te dejamos un par de recetas con carne molida para cambiar el menú de la semana. Es una gran opción para utilizar como ingrediente principal o como relleno.
Por: Desiree Perea
Realmente no existen grandes limitaciones en cuanto a la carne molida. Puedes elegir el corte que prefieras y pedirlo molido. Eso sí, considera piezas que contengan un porcentaje de grasa para mantener húmeda la preparación final. Existen recetas tradicionales con esta presentación como las albóndigas, que se sirven con espagueti o algún tipo de pasta.
Sin embargo, existen muchas recetas en las que puedes cocinar carne molida. Te dejamos un par de opciones que puedes incluir en el menú de la semana. Esta carne no requiere de mucho tiempo dentro de la cocina, por lo que es una opción no tienes mucho tiempo para cocinar.
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En primer lugar, puedes preparar una versión alternativa del alambre tradicional. Si bien se utiliza bistec en trozos, la carne molida puede ser un gran sustituto. Al cocinarla, recuerda dejarla cocer hasta que el líquido desaparezca por completo.
Así podrás obtener una buena textura para hacer tacos. No puede faltar el pimiento y cebolla en trozos, aunque puedes jugar con otras verduras como el chile poblano o un poco de jitomate.
También puedes darle un giro en sabor y textura a las clásicas hamburguesas con unas rebanadas de queso en el medio. Recuerda sazonar la carne molida con ajo, cebolla, especias y sal. Añadir huevo a la mezcla ayuda a que la estructura de las hamburguesas se mantenga firme. Y para mantener la forma circular, puedes colocarlas unos minutos en el congelador una vez que están formadas.
Por otro lado, este tipo de carne es un gran elemento para platillos que van horneados. Contiene una buena parte grasa que permite hidratar el interior de diversas recetas, tal es el caso de la lasaña. Las capas se forman con láminas de pasta, salsa boloñesa y salsa bechamel.
Además, no puede faltar el queso fresco para gratinar entre cada capa. Puedes acompañar esta receta con un pan de ajo con parmesano.
Este es un clásico y digno representante de la cocina fusión conocida como tex-mex. Es una gran opción para servir como entrada o aperitivo durante reuniones con amigos o familia. Consiste en un plato ligeramente líquido que incluye frijoles enteros con carne molida. Se hidrata con una salsa de jitomate ligeramente picante.
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También puedes optar por una receta casera y una de las favoritas en México. Para formar las tortitas utiliza un poco de pan molido para ayudar a la firmeza de la carne molida. Para esta receta puedes preparar una especia de salsa o caldillo para bañarlas al final. No necesitas una preparación muy difícil, únicamente hierve jitomates con un poco de chile chipotle y licúa.
La carne molida es sin duda el ingrediente favorito para preparar rellenos. Por ejemplo, los chiles en nogada no son lo mismo sin la carne molida, que puede ser de res o cerdo, con una serie de frutos secos y fruta para crear una fusión perfecta de salado y dulce. Aquí puedes jugar con diversos ingredientes, desde zanahoria, papas y chícharos hasta jitomate y calabacín.
Por último, otra sugerencia para utilizar el ingrediente en recetas con carne molida como relleno es con antojitos mexicanos clásicos. La parte de la carne es la que lleva toda la sazón, no debes olvidar este paso. Incluso aquí es más importante, pues únicamente está cubierta por una tortilla de maíz. Tampoco pueden faltar los toppings estrella: crema, queso fresco rallado, lechuga y una buena salsa.
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