Circuito del Nopal: como Valtierrilla no hay dos
Acompáñanos a conocer el Circuito del Nopal, uno de los secretos más deliciosos de Guanajuato donde hay nopal para comer, beber y untarse.
¿Qué hay más representativo en México que el nopal? Presente en el escudo nacional y en cualquier variedad de recetas, el nopal es uno de los clásicos de nuestro país y también uno de los más exportados hacia el extranjero.
Texto e imágenes: Michelle López
Para disfrutarlo no hay nada mejor que la región de Valtierrilla en Salamanca, Guanajuato. Esta tierra es famosa a nivel mundial por la calidad inigualable de su producción, así que nos fuimos a recorrer el Circuito del Nopal para conocer en primera fila el campo y sus productos.
El inicio del Circuito del Nopal
En cuanto pones un pie en Valtierrilla debes prepararte para una experiencia de campo de ensueño. El recorrido comienza en la plaza principal del lugar, donde serás recibido con una chivita, un delicioso pan hecho con nopal, relleno de queso y espolvoreado con azúcar. Junto a un café de olla típico, son un desayuno difícil de vencer.
Las chivitas son un pan dulce hecho con nopal.
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Ya bien alimentado, llega el momento en que abordarás un tractocamión (así como lo oyes: un tractocamión) hacia los cultivos. Sobre tu cabeza descansa el sombrero de paja más adorable del mundo y a bordo del transporte puedes disfrutar música en vivo.
La primera escala es en Pronovpal, una procesadora que distribuye en Guanajuato y exporta a Estados Unidos desde nopales hasta ejotes y cerezas. Aquí probarás todo tipo de alimentos hechos con nopal: churritos, salsas, nopales en escabeche, y hasta un destilado con mezcal. Emplean principalmente a mujeres de la región, quienes así tienen una oportunidad de trabajo e independencia económica.
Cuando te des cuenta de la fuerza del licor, será demasiado tarde.
¿Nuestros preferidos? ¡Los churritos! A simple vista podrían parecer los típicos churritos de calle, pero su consistencia y el equilibrio de su sabor pronto te harán ver que se trata de una botana mucho más especial. Ten cuidado con el licor; su sabor dulce y ligero puede hacer que te olvides de que tiene mezcal hasta que ya no haya vuelta atrás.
El Circuito continúa hacia Valnopal, donde el nopal se utiliza para la elaboración de productos cosméticos como jabones, shampoo y cremas corporales. Aquí aprenderás de los beneficios que tiene el nopal, como su alto contenido en fibra y sus bondades para adelgazar, además de que podrás elaborar tu propio jabón con nopal, romero y rosa mosqueta. No te vayas sin probar el xoconostle enchilado.
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El plato fuerte
Valtierrilla es como un viaje en el tiempo, donde cada paso está rodeado de pencas que crecen hasta en los árboles, animales de granja, un sol penetrante y el tiempo que transcurre más lentamente. La mayoría de la zona carece de señal telefónica e internet; los mismos productores reconocen que no desean instalar la red para que la gente que visite se desconecte completamente de las preocupaciones diarias.
La última parada es inolvidable: ¡pencas rellenas! Una penca de nopal se corta a lo largo y se rellena de distintos guisos – choriqueso, pollo, pastor, hongos, todo acompañado de tortillas de nopal, aguas frescas y salsitas varias. De postre, una nieve de nopal y garambullo perfecta para el calor seco de la región.
Cada penca se cuece a las brasas.
Imposible dejar Valtierrilla sin montones de productos nopaleros y unas inmensas ganas de volver.
¿Lo mejor de todo? No necesitas visa para entrar.
Infografía: Alicia O. Cariño