Para muchos artistas, el crear obras sin un café a la mano es una tarea difícil de concluir. Pero para Maria A. Artistidou, literalmente sería imposible.
Esta chica es una ilustradora que comenzó a producir obras de personajes, caricaturas, animales y personas por accidente cuando en una ocasión derramó una taza de café sobre un lienzo. Dando rienda suelta a su imaginación comenzó a degradar la intensidad del café sobre el papel para dar forma a las imágenes que la han hecho famosa en el mundo por la originalidad del material que emplea.
Usando café diluido a distinto espesor, le es posible obtener varios tonos de sepia para pintar sobre papel para acuarela. Algunos de sus resultados más memorables son estos:
Aún así, Maria no se ha detenido con un solo estilo. Su creatividad la ha llevado a experimentar haciendo obras clásicas de Salvador Dalí, Vicente Van Gogh, Edward Munch y Pablo Picasso sobre pasteles; es una mezcla entre fondant y fotografía en la cubierta del pastel, pintada a mano:
Una vez más, se comprueba que el café es fuente de inspiración. Después de todo:
Todo lo que necesitas es amor y un poco de café
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