Aquella persona que toma espresso, ama el café, y de eso no hay duda. Pero, cuando tomamos uno, ¿bebemos el de mejor calidad? Ariadna Chaparro, primer lugar en la Competencia Nacional de Baristas, nos dice cómo distinguir cuando un espresso está bien hecho.
Por Alina Hernández @alinahernan
El secreto está en la superficie

Una manera fácil de identificar un buen espresso es observando la superficie, que debe ser color dorada o avellana.
Manchas blancas

Otra característica es que no debe tener manchas blancas en la superficie: Si tiene una mancha blanco como un lunar, significa que hubo una sobre extracción, o sea que el café se quemó.
Crema consistente

La crema es la capa dorada o color avellana, para comprobar que es un buen espresso, mete una cuchara y gírala. Si la crema se reincorpora, quiere decir que es un bueno, si se parte y no se vuelve a juntar, no está bien hecho.
Tamaño adecuado

La mayoría de las tazas de espressos es de tres onzas. Sin embargo, el café debe ser solamente un tercio y no llegar hasta el tope. Esto asegura que tenga un buen cuerpo.
Sabor

El sabor debe ser dulce y equilibrado. Es decir que tengan cierto amargor y cierta acidez, pero que ninguno de esos sabores sea demasiado intenso.
Exprés cortado

Debe ser una bebida de tres onzas: una de café, por dos de leche. Debe estar cremoso. El cortado es con leche y el macchiato es solamente con una cucharada de espuma.
