El 9 de diciembre de 2020, el gobierno, líderes empresariales y el sector obrero firmaron un acuerdo en el que se solicitó al Poder Ejecutivo aplazar la discusión de las reformas a la subcontratación para este mes de febrero en curso. La razón: establecer definiciones claras sobre lo que se considera legal e ilegal en cuanto a la subcontratación, con el fin de buscar una regulación en contra de las malas prácticas sin afectar a las empresas que acuden a este esquema laboral de forma legal, ya que varios especialistas señalan que desaparecer la subcontratación laboral traería graves consecuencias a la economía, al empleo y la competitividad de las empresas.
Al respecto, Alejandro Salafranca Vázquez, titular de la Unidad de Trabajo Digno de la Secretaría de Trabajo y Previsión Social (STPS) presentó a finales de 2020 los cinco pilares sobre los que avanzará la iniciativa de reforma para la subcontratación: registro nacional, fortalecimiento de la figura de las inspecciones, subcontratación acotada, especialización y transparencia en contrataciones.
De acuerdo con Armando Leñero, Presidente del Centro de Estudios para el Empleo Formal (CEEF), los últimos tres aspectos podrían presentar dificultades para la industria aérea si se establecen tal y como se han presentado actualmente y se aplican a rajatabla. “Los servicios complementarios que tiene la industria aérea son muchísimos, y ésos son los que normalmente se subcontratan. Poner una limitación de este tamaño obligaría a las empresas aeroespaciales y aeronáuticas a tener toda una plantilla de trabajos especializados y así no funcionan las empresas en el mundo”, mencionó Leñero al diario digital A21.
Foto: Anna Sullivan/Unsplash.
Por ejemplo, una aerolínea subcontrata empresas de catering, de mantenimiento, de operaciones en tierra, entre muchas otras más para el correcto funcionamiento de su negocio. Si se aplicara la reforma para la subcontratación como se plantea, las empresas aéreas en México sólo podrían subcontratar servicios no especializados como vigilancia y limpieza. Una situación similar se plantea en el sector aeroespacial, donde los clusters aeronáuticos emplean a cerca de 150 mil trabajadores, de los cuales cerca de la mitad están subcontratados.
¿Qué hay de la industria turística y su impacto con la reforma a la subcontratación? La cadena de valor adjunta a la industria aérea, como lo es el turismo, también podría verse afectada por estos tres pilares de la reforma para la tercerización. Un hotel, por ejemplo, ocupa muchos trabajadores especializados y no puede tenerlos a todos bajo su nómina. Es por eso que ocupa la subcontratación.
Foto: Laurentiu Morariu/Unsplash.
La propuesta que hacen los empresarios mexicanos al gobierno federal, es regular las malas prácticas y el outsourcing ilegal, sin perjudicar a las compañías y prestadores de servicios que hacen uso de este esquema de forma legal y responsable. En ese sentido, la reforma a la subcontratación como está planteada, afectaría especialmente a las micro, pequeña y mediana empresas (MIPyMES), las cuales contribuyen con alrededor del 52% del Producto Interno Bruto en México y generan el 70% del empleo formal, especialmente en el sector de servicios.
Esta medida, además, afectará a los turistas, quienes se enfrentarán a incrementos sustanciales en hospedaje, vuelos y servicios en el destino, lo cual pondría en jaque a la ya de por sí afectada industria turística.
Foto de portada: Olivia Anne Snyder/Unsplash.
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