Inyectar el pavo es un paso crucial antes de llevarlo al horno. Conoce las opciones ideales para potenciar el sabor, jugosidad y textura de la carne.
Al igual que la pierna o el lomo de cerdo, el pavo se mantiene como uno de los grandes protagonistas de las cena decembrinas. Prepararlo en casa es una misión que sin duda requiere de paciencia. Antes de pensar en el horneado, inyectar el pavo es un paso crucial para ayudar a la jugosidad y sabor de la carne. En esta nota, te contamos sobre 5 opciones de líquidos perfectos para aumentar y mantener la humedad interna de esta ave.
Por: Desiree Perea
Un caldo profundo y aromático es la opción mas apreciada para inyectar el pavo debido a su alta efectividad. Aunque mantiene sabor propio, no termina por ser protagonista; al contrario, se fusiona a la perfección con el sabor de pavo natural. Es importante colarlo antes de colocarlo en la jeringa para lograr que las inyecciones sean limpias. También considera recudir el punto de sal, sobretodo si vas a cocinar pavo ahumado, pues este ya viene sazonado.
Te podría interesar: 5 opciones de guarniciones para la cena de Navidad
La grasa es considerada a nivel mundial como uno de los mejores conductores de sabor, así que aprovecharla para inyectar el pavo para nada es mala idea. La mantequilla específicamente, aporta grasa y suavidad que enriquece las fibras musculares. Para lograr una mezcla más amable con la jeringa, puedes mezclarla con un poco de jugo de naranja o caldo. No debe dejar que se enfríe pues la mantequilla comenzará a solidificarse, tapando la aguja por completo.
Similar a lo que ocurre con la carne de cerdo, el pavo combina muy bien con sabores dulces. La piel se carameliza a la perfección cuando se barniza con un poco de miel. Sin embargo, este efecto también puede lograrse a nivel interno si se inyecta un este líquido dulce. Además, para esta técnica, la acidez logra ablandar la carne para que así, los jugos internos puedan abrirse paso sin problema. Lo ideal es utilizar jugos frescos, sin semillas ni gajos.
Te podría interesar: ¿Cómo saber si el pavo para tu cena está crudo?
Durante esta temporada, la sidra de manzana se convierte en una de las bebidas favoritas. Además de ser la protagonista de los brindis, también vale la pena aprovecharla al momento de preparar el pavo. Mantiene el dulzor justo para potenciar las especias y el sabor natural de esta ave de temporada. Esta bebida fermentada se presenta completamente limpia, así que realizar las inyecciones no es nada complicado.
Por último, esta es una alternativa de la sidra de manzana si quieres inyectar el pavo sin rastro de notas dulces. El pavo ahumado reduce en gran medida el tiempo de horneado, para esta pieza, la cerveza es perfecta para no alterar el sabor original. La mejor opción son las cervezas lager o ámbar; evita por completo las oscuras pues durante la cocción, las notas amargas se potencializan arruinado el sabor final.
Aunque inyectar el pavo alarga el proceso de preparación, vale la pena por completo. Los efectos se comprueban una vez que termina el proceso de horneado. Aunque la decisión parece simple, es importante conocer y diferenciar sobre lo que ofrece cada uno de los líquidos para inyectar. Discutir sobre cual es mejor que otro simplemente no vale la pena, todos son correctos y depende del propósito final de la receta. Prepárate para sorprender este año con un pavo jugoso que seguro, dejará a todos sin palabras.