Mosto, el concentrado de uva para el vino que también se consume

Sin esta extracción frutal, el vino simplemente no existe. No, no es lo mismo que el jugo de uva, pues esta bebida ya está modificada. El mosto es el concentrado natural que se obtiene al exprimir las uvas. Este líquido es simple y no busca presumir más; sin embargo, es clave obtener una buena base para después poder servir vinos con una calidad excepcional. A continuación, te contamos sobre la versatilidad del mosto más allá de la industria vinícola.

Por: Desiree Perea

¿El mosto es exclusivo de la industria vitivinícola?

Aunque su uso principal es para la elaboración de vinos, vale la pena destacar que el mosto presume un gran potencial dentro del universo gastronómico. Al no sufrir modificación alguna, este jugo concentrado puede disfrutarse como una bebida natural. Es importante tomar en cuenta que contiene un porcentaje importante de azúcar; aunque es natural, no es recomendable para aquellas personas con diabetes. 

Sin embargo, para aquellos que buscan una fuente de energía durante el día, el mosto es una elección inteligente. Por otro lado, vale la pena destacar que concentra gran parte de los beneficios de la uva fresca; por ejemplo, es un producto rico en antioxidantes, minerales (potasio, magnesio y calcio) y vitaminas (C y del grupo B).

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Ahora, en cuanto a su uso fuera del mundo de los vinos, el mosto destaca como un ingrediente versátil. A partir de el, se puede obtener el arrope: un jarabe espeso que se logra al reducir el mosto. Se aprovecha en postres o para preparar salsas para acompañar carnes rojas o vegetales.

Asimismo, funciona como base para preparar cocteles más suaves. A diferencia de la versión fermentada, en el mosto predominan las notas dulces y ligeramente ácidas. De hecho, se ha encontrado en el, una alternativa popular dentro de la categoría de mocktails. 

La importancia de una buena bebida base

La cosecha de las uvas sin duda es clave para obtener un buen vino; sin embargo, a simple vista, no es posible evaluar realmente si se obtuvieron piezas buenas o malas. Es aquí donde el mosto se convierte en un factor clave. Gracias a este concentrado, es posible evaluar si el líquido base para el vino es bueno; si el mosto no es bueno, no hay forma de obtener un buen vino.

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Es crucial realizar una revisión minuciosa antes de llevar a este jugo al proceso de fermentación. En este paso también es posible separar algunos litros para producir jugos empaquetados, arrope e incluso, dulces. Realmente la versatilidad de uso del mosto es amplia.

Gracias a ello, se ha encontrado una verdadera joya dentro de la categoría de bebidas. Para aquellas personas que no son fanáticas del vino, o que buscan disfrutar de un bebida refrescante con notas similares a la versión fermentada, el mosto se ha posicionado como una opción favorita. Nada como disfrutar de una extracción fresca y natural de una fruta tan exquisita como la uva.