Dos estilos, dos denominaciones de origen que rivalizan en las copas. Ambos son elaborados bajo el método champenoise, pero tienen sus diferencias; aquí te explicamos cuáles son.
Dos estilos, dos denominaciones de origen que rivalizan en las copas, pero que ofrecen pretextos ideales para la alegría, la frescura y las celebraciones de todos los días.
Por Alfonso Franco
En 1872 nace el primer cava de la mano de Raventós y Codorniu, y es hasta 1987 que se establece la denominación de origen, que no se limita a una sola entidad, abarca 160 términos municipales españoles situados en siete comunidades autónomas como Cataluña, Aragón, Navarra, País Vasco, La Rioja, Extremadura y Valencia, lo que brinda una mayor diversidad de notas.
El término Cava proviene de la palabra empleada para designar las cuevas donde se elaboraba. También se fermenta bajo el método champenoise, y por ley debe permanecer nueve meses como mínimo sobre lías, lo cual le otorga un potencial de guarda mayor al del champagne que está obligado sólo a seis.
El ensamble clásico de estos vinos consiste en uvas macabeo, xarel-lo y parellada, aunque otras cepas están autorizadas para lograr distintas características, en especial la chardonnay. En la etiqueta y el corcho, el cava lleva una estrella de cuatro picos.
Vino espumoso: Placer efervescente
Dom Pierre Pérignon perfeccionó el método para vinos espumosos, y la denominación de origen se legisló hasta 1936, restringiendo el territorio a la provincia de Champagne, Francia.
Se elabora bajo el método champenoise. El ensamble clásico de uvas es el de pinot noir, chardonnay y pinot meunier, aunque hay algunas otras cepas autorizadas. El suelo calcáreo de la zona controla la acidez de la fruta y, de hecho, la palabra champaña significa “calizo”.
La limitación geográfica hace que sean vinos muy caros, comparados con otros espumosos. Una champaña certificada se distingue por llevar en la etiqueta y en el corcho una estrella de cinco picos.
Doux: más de 50 gr/l
Demisec: de 35 a 30 gr/l
Sec: de 17 a 35 gr/l
Extra sec: de 12 a 20 gr/l
Brut: menos de 15 gr/l
Dulce: más de 50 gr/l
Semiseco: de 33 a 50 gr/l
Seco: de 17 a 35 gr/l
Extraseco: de 12 a 20 gr/l
Brut: 0-15 gr/l
Extra brut o brut nature: menos de 6 gr/l